PLAYA DEL CARMEN, MX.- “Yo gaste mi dinero, mi tiempo y mi esfuerzo para venir desde Matamoros, Tamaulipas aquí a Quintana Roo, a Playa del Carmen, tuve que invertir para llegar mi compa, vengo con 10 pelaos y 2 trocas; nomás quiero que me recupere parte de mis gastos, los gastos que yo he hecho hasta ahorita ascienden a 20 mil dólares, no tengo nada que perder a mí lo mismo me da matar que secuestrar”.
Con estas palabras se dirigen los extorsionadores telefónicos a sus futuras víctimas sin importar si cuentan o no con dinero, porque al parecer usan el directorio telefónico para elegirlos al azar, e inclusive hasta les dicen la dirección donde viven; sin embargo, los agraviados que optan por descolgar sus teléfonos no han tenido mayor problema, aunque lo más recomendable es no contestar llamadas de número desconocidos.
Según las investigaciones de las autoridades, el miedo es la principal arma de los extorsionadores, porque se aprovechan de este para obtener algo de dinero, ya que el que recibe la llamada telefónica, aunque no pague el monto exigido no pasa nada.
La siguiente trascripción es de una llamada hecha por un extorsionador a un vecino de la colonia Luis Donaldo Colosio Murrieta de clase baja, es decir no tiene dinero y vive al día:
Antes de hacer cualquier trabajo primero investigo a la gente para ver con qué cuenta o con qué no cuentan para no estar dando palos de ciego.
Yo gasto mi dinero mi tiempo y mi esfuerzo para venir desde Matamoros, Tamaulipas aquí a Quintana Roo, a Playa del Carmen y yo tengo que invertir para llegar mi compa, yo vengo con 10 pelaos y 2 trocas los cuales estamos parados en puntos estratégicos así como rondado su domicilio mi compa.
Quiero que me conteste con el corazón en la mano para usted es muy importante la vida y la tranquilidad tanto suyo como el de su familia, y espero no subestime la manera en que le estoy hablando, les dije a mis muchachos que no toque a ningún integrante de su familia, solamente pedí que lo observaran como lo han hecho.
Le estoy haciendo la llamada en estos momentos cosa que yo no acostumbro hacer, el muchacho que está cargo de darle seguimiento a usted está a cargo de la seguridad tanto de usted como de su familia, fue el que me dijo que lo mejor era hablar con usted, porque yo lo he tenido a distancia inclusive hemos hasta cruzado y no porque usted sea una persona tonta o distraída simplemente usted va caminando con su familia como cualquier gente cotidiana.
Yo lo conozco a usted y su familia como si estuviera viendo la palma de mi mano, y así como me bastó un botón para comunicarme con usted así también me puede bastar un botón, para yo ahorita le dé luz verde a mis muchachos y me traigan a la muchachita que usted más quiere, pero yo sé que ni vendiendo su casa, coche, que ha logrado usted durante tantos años de trabajo, me va a poder aportar las cantidades que yo acostumbro pedir.
Por eso es que le estoy haciendo esta llamada porque yo gasto mi tiempo mi dinero y mi esfuerzo; mi tiempo y mi esfuerzo tal vez no lo recupere pero mi dinero a como dé lugar.
Yo nomás quiero que me recupere parte de mis gastos, los gastos que yo he hecho hasta ahorita ascienden a 20 mil dólares, yo sé que a lo mejor con esa cantidad no cuenta, pero puede aportar algo, yo no tengo nada que perder, a mi lo mismo me da matar que secuestrar.
(Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
