CANCÚN, MX.- Luego de las primeras 24 horas del paro laboral de policías municipales en demanda del pago completo de su salario y otras prestaciones, este domingo se percibió una tensa calma en la corporación policiaca, y aunque laboran de manera “normal” no descartan algunos elementos que se apliquen sanciones o se tomen represalias por la manifestación del sábado por algunas horas.
CANCUN, MX.- El presidente municipal Gregorio Sánchez Martínez, quien reconoció que es muy probable que haya una narconómina en Seguridad Pública, afirmó que no permitirá que lo chantajee un grupo de cinco policías que pretende manipular a los elementos de la corporación, porque el acto de tomar las instalaciones proviene de lo más putrefacto de la política, de corrupción y de la delincuencia.
Aseguró que a todos los policías operativos no se les ha tocado su salario, a su llegada a la presidencia municipal les aumentó 50 por ciento su salario, pero también descubrieron mediante una auditoría que había muchos policías administrativos y secretarias que ganaban 25 y 35 mil pesos, trabajando en oficinas, a esas personas se les ajustó el salario y se les tocaron sus intereses.
“A estas personas no sabemos, alguien, les subió esos salarios tan estratosféricos.
Fueron alrededor de 50 a las que se les tocó el salario, porque como dicen en mi pueblo todos rabones o todos coludos, aquí la gente debe que ganar con un tabulador, como lo hicimos en el Ayuntamiento, que se ajustaron todos los tabuladores.
Obviamente estas gentes manejan mucho poder e influencia dentro de la corporación y son las que están provocando esta desestabilizad”, aseguró.
El primer Edil dijo estar dispuesto a revisar expediente por expediente si alguien está inconforme porque se le trastocó su salario o sienta que se cometió una injusticia, para que de inmediato se le restituya, porque fue el administrativo de la policía quien les envió toda la información con los puestos y de acuerdo con la reestructuración administrativa nadie puede ganar más de lo que dicen los puestos.
Comentó que esto ya se politizó porque hay dinero de la delincuencia, de la corrupción, pero no van a ceder, van a buscar el apoyo del Ejército, también ya se le informó a la Marina y si es necesario se lo harán patente a la Secretaría de Gobernación para que se proceda a que los apoye la policía federal, de ello ya habló con el Gobernador, quien le manifestó todo su apoyo para enviar policías preventivos a Cancún, porque que no van a acceder a chantajes de tres o cuatro líderes corruptos que manipulan, tergiversan y que engañan a los demás elementos.
Al preguntarle si es cierto que existe una narconómina, el alcalde respondió que “dicen que cuando el río suena es porque agua lleva”, motivo por el que no va a permitir que delincuentes disfrazados de policías sigan denigrando la institución, cuando lo que deben de hacer es vigilar las calles, reducir los asaltos y robos, porque si algo ha apoyado desde que llegó al Gobierno, es a la policía, en todos los aspectos, por lo que esto que están haciendo es un acto totalmente manipulado, pagado y financiado de lo más putrefacto de la corrupción y la delincuencia.
Sánchez Martínez declaró que realmente la policía estaba muy mal en el municipio y han ido poco a poco dándole respuesta a la ciudadanía, por lo que se da el tiempo mínimo necesario e indispensable para poder regularizar la situación.
Reiteró que todos los policías pueden hablar con él, pero no es la forma, él no accede a chantajes y si quieren entrevistarse personalmente todos los miércoles está atendiendo, ya les dijo que manden una comisión y los recibe en el Palacio, porque no tiene porque ir a hablar con chantajistas ni mucho menos con gente que no respeta la ley; “yo con gente que tergiversa la ley no dialogo, si forman una Comisión con mucho gusto los recibo en el Palacio”, aseveró.
Por último, el presidente municipal, Greg Sánchez, al referirse a patrullas, comunicó que hay más de 350 que compraron con recursos propios que andan resguardando a la ciudadanía. (Fuente: Diario de Quintana Roo)
El secretario de la corporación, general Urbano Pérez Bañuelos, aseguró que se trató de un problema de tipo administrativo y que están dispuestos a escuchar inconformidades pero de manera individual no “en bola”.
Durante un recorrido efectuado por Novedades Quintana Roo en la sede de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) municipal ubicada en la avenida Xcaret, cerca del primer cuadro de la ciudad, se observó escaso movimiento.
En la planta baja del inmueble donde se localizan las oficinas recaudatorias y una agencia del Ministerio Público del Fuero Común, algunos elementos policiacos iban y venían como cualquier otro fin de semana.
Además en los patios de la corporación fue constante el circular de algunas unidades, no así de la policía de Tránsito pues la mayoría de las patrullas estaban estacionadas en uno de los costados del edificio.
En las calles los operativos se realizaron de manera rutinaria, y según elementos de la corporación que pidieron el anonimato por obvias razones, manifestaron que las instrucciones de los comandantes y jefes de sector es no bajar la vigilancia pero estar pendientes de cualquier llamado.
El sábado estalló el paro de labores de los servidores públicos y alrededor de las 16:30 horas más de 800 policías regresaron a las calles luego de que les devolvieron un descuento que les habían aplicado en la quincena.
Fueron cerca de nueve horas las que la ciudad se quedó sin vigilancia por parte de la policía preventiva, tarea que tuvo que asumir la Policía Judicial del Estado (PJE) , la policía estatal y hasta el personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Informes dados a conocer en la edición de ayer indican que el detonante del “estallido laboral” fue que esta quincena el gobierno municipal le quitó a todo al personal un “apoyo a transporte”.
Incluso un día antes del paro al Jefe del Estado Mayor de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito, Silvestre Chávez García, le habían llegado rumores de que personal de la corporación policiaca se encontraba inconforme porque les habían quitado una prestación de su salario.
En respuesta Silvestre Chávez dijo que era una homologación a los salarios de la policía y que el ajuste salarial era para el beneficio de los mismos elementos policíacos. No aclaró en qué.
Sin embargo los oficiales decidieron tomar cartas en el asunto y dejaron de laborar el sábado. El presidente municipal Gregorio Sánchez Martínez, responsabilizó a bandas delictivas estos hechos.
Y aun cuando ayer todo parece que se encontraba normal, existe tensión entre los oficiales porque más adelante se tomen represalias en su contra, pues son conscientes que de acuerdo al reglamento interno que conocen desde hace años, contempla sanciones a quienes incurran en estas prácticas.
Ayer el secretario de la corporación Urbano Pérez Bañuelos, dijo en una entrevista telefónica a un noticiero radiofónico que efectivamente fue una cuestión administrativa que causó confusión por cuestión de que últimamente tienen la misión de homologar los salarios de todos los integrantes de la corporación conforme a la Secretaría de Finanzas.
“Estos movimientos en algún momento causaron problemas en el sentido de las altas y bajas en los salarios de acuerdo a su trabajo, jerarquía, tiempo y a su especialidad. Entonces sí hubo algunos problemas que se detectaron hace tres días”, comentó.
Sin embargo refirió que la vigilancia se normalizó ayer y que las autoridades municipales están abiertas al diálogo con quienes aún estén inconformes pero que se debe hacer de manera personal no en grupo, no en equipo “ni como se dice coloquialmente en bola”, como sucedió el sábado. (Fuente: SIPSE/Novedades de Quintana Roo)
