Pelean por rescatar pieza arqueológica… y luego la olvidan

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PLAYA DEL CARMEN, MX.- Luego de que se creará la “Comunidad del monolito”, de que se propusiera construir un museo para su exhibición, de que fuera materia de profundas discusiones y debates, e incluso, de que estuvo a punto de ser robada; la pieza arqueológica conocida como el “Monolito de Playa del Carmen” permanece olvidada en las bodegas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), sin que hasta la fecha las autoridades municipales hayan solicitado su custodia.


De acuerdo al INAH, el Monolito de Playa del Carmen, es una escultura que representa a Itzamná, la deidad principal de los mayas del Postclásico tardío (1200 -1550 d.C.), y se cree que esta pieza habría presidido el acceso a un templo. Durante muchos años permaneció en un predio de la zona de Shangri La, propiedad de Adolfo Lubcke, aunque la escultura fue cuidada y protegida por Ernst Wolfgang Deutsch Aguerrebere. El INAH la recuperó en 2008, luego de que el 1 de septiembre un grupo de personas intentara sustraer la pieza histórica.
La quisieron, pero ya no la quieren
Tras la entrega de la escultura al INAH, se generó toda una polémica y un círculo de “estudio” y discusión en torno a dónde debería colocarse el Monolito de Playa del Carmen; el interés que despertó la pieza fue tal, que surgió un grupo llamado la “Comunidad del Monolito”, estaba integrado, entre otros, por el cronista Raymundo Tineo Celaya; el segundo cronista, José Luis Barragán; el ex presidente municipal y ex regidor, Marciano Toledo Sánchez; y el presidente de la Asociación Pioneros de Playa del Carmen, Tomás Burgos.
Algunas de las ideas propuestas por este grupo fueron: acondicionar un espacio para exhibir la pieza en la Plaza 28 de Julio, y reimpulsar la iniciativa de crear un Museo de la Ciudad; de lo que se trataba, era de de mantener el Monolito en Playa del Carmen, por ser ésta la pieza arqueológica más significativa encontrada en la ciudad.
Pero los años pasaron y la pieza arqueológica quedó olvidada en las bodegas del INAH. Ni la “Comunidad del Monolito”, ni ninguna dirección del municipio Solidaridad se volvieron a acordar de ésta, y mucho menos han solicitado al INAH que la regrese a Playa del Carmen, según respondieron en una solicitud de información las direcciones Jurídica, la de Ordenamiento Ambiental y Urbano, la de Cultura, y la de Asesores, que además señaló que “la pieza es un patrimonio nacional que requiere de mucho cuidado y mantenimiento (y) para evitar cualquier deterioro de dicha pieza, y no contando el municipio Solidaridad con un adecuado lugar para su resguardo y protección, el INAH es la responsable de salvaguardar esta pieza arqueológica”.
El INAH restauró el Monolito de Playa del Carmen
Adriana Velázquez Morlet, directora del Centro INAH (CINAH) Quintana Roo, reconoció que diversos sectores de la sociedad de Playa del Carmen han solicitado que la pieza sea expuesta en algún lugar de la ciudad; sin embargo, dijo, las dos administraciones municipales más recientes, la de Carlos Joaquín González y la actual de Román Quian, “han dejado inconcluso el trámite para obtener la custodia de la mencionada pieza”.
La arqueóloga detalló que a finales del 2009, el Taller de Conservación del CINAH Quintana Roo en Chetumal, coordinado por la Maestra Elda Anrubio, concluyó la restauración de este elemento arquitectónico. Precisó que los trabajos de conservación pusieron al descubierto parte de la decoración en estuco que cubría a la pieza, en particular, los elementos de su atavío, incluyendo la representación de cuentas y, posiblemente, plumas. También se descubrieron pequeños fragmentos de pintura verde y roja en algunos sectores de la pieza.
La limpieza de este elemento prehispánico también confirmó que se trata de un elemento arquitectónico, que posiblemente estaba empotrado en un nicho similar a los que hoy pueden verse en los edificios arqueológicos de Tulum. “Seguramente corresponde a alguna estructura que habría sido desmantelada muchos años atrás, posiblemente cerca del área en el que fue encontrada, en un predio de la calle 38 Norte, en el área norte de Playa del Carmen, donde también se conservan los restos de una pequeña estructura”, agregó.
Adriana Velázquez comentó que, de acuerdo a las recomendaciones de la Maestra Anrubio, no es pertinente que la pieza sea expuesta a la intemperie, pues se perderían los pequeños fragmentos de policromía que aún se conservan y se continuaría exfoliando el recubrimiento de estuco de la piedra. (Noticaribe)

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