CANCÚN, MX.- Todo un “misterio” resultó la balacera en la que se enfrentaron elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP) y sujetos armados la noche del domingo, en donde un presunto sicario resultó herido y perdió la vida después en el Hospital General.
CANCÚN, MX.- La Policía Federal Preventiva, división Caminos, fue señalada de incurrir en múltiples irregularidades y de ocultar información en el caso de los dos elementos de esa corporación que dispararon contra los ocupantes de una camioneta tipo Ranger, provocando la muerte de un supuesto delincuente en la carretera Playa del Carmen-Cancún.
De entrada, fuentes extraoficiales revelaron que los policías federales de la patrulla 12121 no fueron agredidos a balazos, sino que los disparos que presentaba la unidad policíaca, fueron realizados por los mismos oficiales, con trayectoria de adentro hacia a fuera a través del panorámico delantero.
La Policía Federal Preventiva ha guardado total hermetismo sobre esta intervención e incluso, versiones extraoficiales indicaron que los dos oficiales de la patrulla 12121 se equivocaron y dispararon contra los ocupantes de la camioneta que no utilizaron unas supuestas armas que tenían dentro del vehículo.
De hecho, los policías federales no permitieron la intervención de la Procuraduría General de Justicia del Estado, pero los agentes judiciales y peritos pudieron ver que dentro de la patrulla federal, estaban tres escopetas y una arma larga AK-47, pero no hay la certeza de que hayan sido retiradas de la camioneta de los supuestos sicarios.
El director general de la Policía Judicial del Estado (PJE), Eduardo Chacón Segoviano indicó que fueron muy respetuosos de los ámbitos de competencia en este caso y que sin ser perito, notó que los disparos que presentaba la patrulla en el panorámico, fueron realizados de adentro hacia afuera.
Además, Chacón Segoviano mencionó que los policías federales no les dieron acceso a la información sobre los hechos y que incluso, en el Hospital General, las pertenencias del ahora occiso, Isidro Zambrano Mulato, de 45 años, fueron retiradas por un capitán.
Versiones extraoficiales señalaron que un alto mando de la Policía Estatal Preventiva sacó toda la ropa y pertenencias del ahora occiso, para después entregarlas a elementos de la Policía Federal, en un intento por ocultar la identidad de la víctima.
Hasta el momento no se ha informado si Zambrano Mulato, quien recibió cinco disparos de los policías federales, tiene alguna relación con hechos ilícitos.
Incluso, trascendió que el ahora occiso no intentó usar ningún arma de fuego al momento de ser acribillado, la noche del domingo, en el estacionamiento de un vivero, en el kilómetro 330 de la carretera Playa del Carmen-Cancún. (Fuente: Enfoque Radio)
El occiso alcanzó a identificarse antes de morir como Isidro Zambrano Mulato, de 45 años de edad, pues las identificaciones y la ropa, fueron aseguradas por el comandante de la Policía Estatal Preventiva (PEP) Pablo Lucio Quiroga, según informó personal de seguridad del nosocomio.
A simple vista, los peritos de la Subprocuraduría de Justicia en la zona Norte observaron que los impactos de bala que presentaba la patrulla 12121 de la Policía Federal, fueron hechos de adentro hacia afuera, pero esto no pudo ser confirmado pues se les impidió hacer su trabajo en el lugar de los hechos.
Muchas son las interrogantes que han ido surgiendo en torno a la balacera que fue reportada por policías federales la noche del domingo, la cual fue radiada a todas las corporaciones policiacas a través del número de emergencias 066.
Cuando elementos de la Policía Judicial del Estado (PJE), de la Policía Estatal Preventiva (PEP), Policía Municipal, el Ejército y la Marina llegaron al lugar; varias unidades y elementos de la PFP ya se encontraban acordonando la zona en donde quedaron la camioneta tipo Ranger color rojo y la patrulla 12121.
Ambos vehículos presentaban varios impactos de bala en los cristales y la estructura metálica.
Los federales impidieron que los judiciales se acercaran tanto a la camioneta como a la patrulla y no les quedó más remedio que quedarse como espectadores.
En tanto, elementos de la Policía Estatal custodiaron la ambulancia en la que fue trasladado el presunto sicario que resultó lesionado en la balacera.
Cuando peritos y agentes del Ministerio Público del Fuero Común llegaron al lugar, también fueron corridos por los federales, evitando que iniciaran con la recolección de evidencias.
Sólo algunas fotografías alcanzaron a ser tomadas por los peritos, antes de ser corridos por los federales, con quienes incluso tuvieron un enfrentamiento verbal.
Y es que los federales en todo momento dijeron que ellos se harían cargo del asunto y que esperarían a que llegaran peritos de la Procuraduría General de la República (PGR) y un agente del Ministerio Público Federal.
Sin embargo, los federales tenían ya dentro de la patrulla 12121 las armas largas que según ellos, fueron abandonadas por los dos presuntos sicarios con los que se dio el enfrentamiento; sin esperar a que llegara algún agente del Ministerio Público Federal para hacer el aseguramiento.
Según información obtenida, se trataba de tres escopetas y un arma larga que parecía ser una AK-47 “cuerno de chivo”.
Ayer por la mañana, el director de la PJE Eduardo Chacón Segoviano comentó que efectivamente alcanzó a ver que se trataba de escopetas y lo que parecía ser un arma AK-47, pero en todo momento se mantuvieron al margen.
“No soy perito, pero si se podía percatar que los tiros iban de la patrulla hacia la camioneta y se veían los impactos de bala también. Tenemos fotos de los impactos, de la persona lesionada, efectivamente también había unas armas de las cuales por experiencia de su servidor en la Policía Judicial se pudo percatar que es una AK-47 y escopetas, pero quiero que quede claro: no sabemos si sean de utilería, no sabemos si sean de plástico, no sabemos si son escopetas que llevaba previamente la policía preventiva, no sabemos si se les haya decomisado o no a los tripulantes de la camioneta Ranger color rojo, lo ignoramos. Cuando llegamos nosotros, la policía federal tenía acordonada el área y no permitían que nos acercáramos, posteriormente llegó el Ejército y la Armada y también nos pudimos percatar que se encontraban compañeros de la Policía Estatal Preventiva y de la municipal” dijo.
Más tarde, personal del Hospital General reportó a la Policía Judicial el fallecimiento de una persona herida por arma de fuego.
Cuando los judiciales llegaron al nosocomio, fueron informados que el occiso había sido ingresado momentos antes por paramédicos de la Cruz Roja.
Agregaron que antes de morir, el lesionado alcanzó a decir que se llamaba Isidro Zambrano Mulato, de 45 años de edad.
Al solicitar las pertenencias del occiso, personal de seguridad del hospital dijo que estas habían sido pedidas por un comandante de la Policía Estatal, a quien identificó como el capitán Pablo Lucio Quiroga, quien a su vez se negó a entregarlas a los judiciales cuando se lo solicitaron.
El cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense (Semefo) para la necropsia de ley, y de acuerdo con los primeros informes, presentaba cinco impactos de bala, la mayoría en la zona pectoral de entrada y salida.
Hasta ayer, no se había dado a conocer el resultado de la prueba de rodizonato de sodio que le fue practicado al ahora occiso, la cual permitirá saber si realizó disparos con arma de fuego.
De igual forma, nadie se había presentado hasta ayer a reclamar o identificar el cuerpo de Isidro Zambrano Mulato. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
