CHETUMAL, MX.- Como una escena extraída de una película de humor, el ex delegado de la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) en Quintana Roo, Alfredo Caamal Huchin, fue sentenciado a pagar una multa de 45 pesos, esto como castigo por hostigar sexualmente a ocho empleadas de la dependencia.
Y es que pese a que las empleadas denunciaron al funcionario por abusos, ya que decían que las tocaba y molestaba sexualmente, el Juez de Distrito con sede en esta capital consideró que las acusaciones no eran para tanto, y le impuso este “ejemplar” castigo económico a Caamal Huchin.
La abogada chetumaleña especialista en defensa del género, Gabriela Rojo, señaló que es una burla la sentencia dictaminada por el juez, ya que dijo había muchas pruebas en su contra.
“Es una sentencia injusta, es una sentencia en donde se condena a este señor Alfredo al pago de 45 pesos porque el delito por el que fue juzgado y de acuerdo a las pruebas aportadas por el Ministerio Público que en realidad son muy pocas, el Juez Primero de Distrito decreta que el delito por el cual se le está acusando a esta persona es por hostigamiento sexual, lo que no concuerda con las declaraciones de las afectadas porque ellas en sus declaraciones manifiestan tocamientos corporales y esto no es hostigamiento sexual”.
Según la abogada, el Ministerio Público no aportó pruebas suficientes para acreditar el delito de acoso sexual y desestimó practicar y presentar pruebas psicológicas y periciales de las agraviadas, por lo que no se pudo establecer el daño moral y emocional que recibieron las empleadas.
Además, explicó que las mujeres afectadas ni siquiera fueron notificadas de la la ridícula sentencia que emitió el Juez desde el 31 de mayo, lo que calificó de ilegal pues las deja en total desamparo jurídico, ya que pasó el tiempo para que puedan reclamar la decisión. (Fuente: Periodistas Quintana Roo)
