No presentan denuncia formal por plagio de hijo de líder cañero

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CHETUMAL, MX.- La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) da por cierto que son ocho millones de pesos que solicitaron los secuestradores a la familia de Abraham Humberto Rivas Peña, hijo del líder cañero de la Confederación Nacional de Productores Rurales (CNPR), Gabriel Humberto Rivas Canul, a pesar de que no ha tenido contacto con la familia de la víctima; además de que por testimonios se supo que participaron dos camionetas en el plagio y que desde días anteriores un vehículo rondaban su casa sospechosamente.


Dos testigos de los hechos ya rindieron su declaración ministerial y refieren que son cinco o seis sujetos los que secuestraron a Rivas Peña en un camino de terracería de la zona cañera del ejido Allende.
El día de hoy se reanudó la búsqueda del hijo del líder cañero en diversos puntos de la ribera del Río Hondo, a la que se sumaron elementos del Ejército, sin que la PGJE haya podido hacer contacto con su familia, que no ha acudido a poner formal querella.
Fuentes de la dependencia informaron que el día de ayer, en base a la solicitud de auxilio que se hizo a través del número de emergencia 066, el agente del Ministerio Público del Fuero Común destacamentado en la comunidad de Pucté, municipio de Othón P. Blanco, inició de oficio la averiguación previa marcado con el número 057/05/2012 por el delito de secuestro en contra de quienes resulten responsables.
De acuerdo a esa averiguación previa iniciada, ayer por la tarde, Abraham Humberto Rivas Peña llevaba comida y gasolina a los trabajadores y en el camino dio un aventón a dos cortadores de caña de la zona, y que fue secuestrado cuando ya se enfilaba rumbo a la parcela de su padre.
Las dos personas que pidieron un “aventón” a Abraham dijeron que la camioneta en la que viajaba Rivas Peña fue rebasada por un vehículo tipo Suburban color blanco, mismo que le cerró el paso.
Indicaron que Abraham, al ver que le habían cerrado el paso, se echó de reversa rápidamente, en un intento de escapar, pero la camioneta se atascó en el monte, y ellos cayeron al suelo.
Fue cuando el vehículo tipo Surburban se emparejó a la camioneta de Abraham, a quien subieron a la fuerza a bordo de la Suburban, pero al lugar llegó otra camioneta tipo Pick Up, dijeron.
Por otro lado, el día de hoy se reanudó la búsqueda del hijo del líder cañero a lo largo de la ribera del río Hondo, en la que participan agentes de todas las corporaciones policiales de la zona sur de la entidad, así como de elementos de la XXXIV Zona Militar de esta ciudad.
Plagiarios conocen red de terracerías de la región
Y es que en la zona por donde ocurrieron los hechos existen infinidad de caminos de terracería que van hacia distintos puntos; por ejemplo, hay salida para la carretera Chetumal – Escárcega y también hay uno que sale por la comunidad La Unión y otro a Campeche, por lo que los secuestradores tuvieron varias opciones para escapar.
Por eso, de acuerdo a fuentes policiales, quien haya planeado el secuestro pudo haber sido una persona que conoce muy bien la zona, porque en esa región hay infinidad de caminos de terracería que van a diferentes sembradíos de caña y solamente quien conoce puede salir de ahí por otra vía que no fueran las carreteras federales, de lo contrario se perdería.
Los delincuentes cometieron el delito sin ningún problema, porque en esa zona no hay vigilancia policial.
Hace muchos años, esa zona era patrullada por elementos del Ejército Mexicano, porque a cada rato aterrizaban las narcoavionetas procedentes de Colombia.
Por otro lado, la Dirección de Servicios Periciales de la Procuraduría General de Justicia del Estado aún no termina los estudios de balística del caso para determinar el calibre de arma que usaron los delincuentes.
Sin embargo, los impactos de bala que presenta la camioneta de Abraham Humberto Rivas Peña, al parecer, corresponden a una pistola tipo escuadra calibre 45.
Hasta el medio día de hoy, los padres del ahora secuestrado no habían comparecido a declarar dentro de la averiguación previa que inició la Procuraduría General de Justicia del Estado en base a la llamada de auxilio que se hizo a través del número de emergencia 066.
Y es que de acuerdos a datos obtenidos en forma extraoficial, días antes que Abraham fuera secuestrado, vecinos de la comunidad de Allende presuntamente vieron entrar por la calle por donde vive el agraviado, un vehículo color blanco parecido al que usaron los delincuentes para cometer el delito.
Mientras que en los pasillos de la policía, se hablaba de que se podría tratar de un dinero que debe el ahora secuestrado, pero la Policía Judicial del Estado sigue trabajando en la búsqueda de Abraham, sin que hasta el momento hallan podido contactar a los familiares de éste. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

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