Sin lugar a dudas, en Quintana Roo se ha tomado tomado muy en serio aquello de que “lo prometido es deuda”.
Y es que se ha encumbrado o perdonado a los mayores deudores del estado.
Entre los estados, Quintana Roo es el segundo con más edeuda y entre los municipios, Benito Juárez es el quinto.
Por un lado, el PRI premió con una Senaduría a Félix González Canto, que llevó la deuda de Quintana Roo de mil 300 a 12 mil millones de pesos.
El Gobernador vive la vida al estilo Chetumal, en el la capital del estado y en la capital del País y seguirá sin preocupaciones, hasta que se le acabe el fuero en 2018.
Por otro lado, la Auditoría Superior del estado y la mayoría priista del Congreso del estado, han optado por mirar a otro lado, en el tremendo endeudamiento del ex alcalde de Cancún “Greg Sánchez”, que llevó la deuda bancaria de Benito Juárez, de 550 a mil 400 millones de pesos.
Del asunto no parece enterarse ni la ASE, ni nadie, pero mientras tanto “Greg” es usado como ariete contra la muy probable alianza entre el PAN y PRD.
En el caso de Félix hay como borrón y cuenta nueva, y en el caso de “Greg” todo parece indicar que se ejercieron “otras” formas de pago.
