Ya no quedó claro qué diantres arregló Paul Carrillo en el tema de los incendios suburbanos de Cancún.
Hace unas tres semanas, Paul, con muletas y férula, fue a uno de estos incendios. Es obvio que poco podría ayudar, y los malosos señalaron que acudió para poder salir en la foto en esta etapa de campañas, pues la difusión de temas de protección civil están excluidos de la veda electoral.
Sin embargo, al día siguiente, se supo que el problema era más grande de lo que parecía y que otra vez los desarrolladores y fraccionadores habían hecho de las suyas, al provocar los incendios a fin de declarar impactados sus terrenos y e iniciar la construcción de sus viviendas.
El secretario del Ayuntamiento, José de la Peña, le hizo al cuento que iban a proceder contra las desarrolladoras, pero estas medidas tenían que ser tomadas a partir de una sesión de cabildo.
Y pasaron los días y los incendios crecieron y crecieron, hasta que finalmente se hizo la sesión de Cabildo.
Pero la gran resolución del Cabildo en el tema de los incedios fue pedir la intervención de las autoridades correspondientes.
Y por si fuera poco, además pidieron que por estos incendios Benito Juárez reciba recursos del Fonden.
Toda una cadena de sinsentidos, si el objetivo sería sancionar a los desarrolladores.
Pero no solo los desarrolladores no han sido sancionados, sino que además, el costo de apagar sus incendios provocados, será subsidiado.
Eso se llama ganar, ganar.
