¿Queremos un Gobernador sonriente o uno capaz? | Por Benjamín Arias

Los Quintanarroenses del mundo necesitamos a un gobernador que tenga las capacidadades necesarias y el más completo para encabezar esa ansiada silla.

Alguien que sea capaz de solucionar los problemas de fondo, de preveer y avanzar con firmeza antes de sonreir a las cámaras.

El PRI tiene una doble apuesta, ganar la elección 2016, pero con un candidato que resuelva los problemas financieros del gobierno y se identifique con las causas sociales de la gente.

Sin embargo, y analizando un poco hacia delante, Pretender ganar con popularidad en 2016, sería equivalente al aceptar de antemano la derrota en las presidenciales del 2018, como ya sucedió en las 3 elecciones anteriores.

Tenemos que ubicar al caballo más completo en las capacidades necesarias para gobernar. Se necesita que encabece un gobierno de elevados índices de calidad administrativa y financiera.

Y no solo eso, básicamente se deben analizar los siguientes conceptos y calificar a cada uno de los aspirantes.

Alguien que conoce profundamente el estado y sus necesidades

Que tiene experiencia comprobada y comprobable en el ejercicio de Gobernar.

Que puede diseñar e impulsar políticas públicas de mediano y largo alcance.

Que es experto en manejo financiero y en administración pública.

Que tiene el carácter firme y acredita autonomía respecto de los grupos de poder fáctico.

Que tiene la formación profesional y la experiencia ejecutiva para administrar con eficiencia y transparencia el gobierno.

Que tiene una historia personal de eficacia, honestidad y lealtad en su desempeño en la administración pública.