PLAYA DEL CARMEN, MX.- Cuando en diciembre del 2014 se aprobó de forma anticipada la ampliación de la concesión del servicio de agua potable en Cancún e Isla Mujeres a favor de Aguakán, así como la privatización del agua por primera vez en el municipio de Solidaridad, también a favor de esta misma empresa y con una duración hasta el año 2053, ya se sabía que este ‘arreglo’ representaba un ‘regalo en despoblado’, pero no se conocían las cifras del quebranto a la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA), organismo bajo control del gobierno del estado que pareciera estar en la ruta del desmantelamiento.

En diciembre del 2014, los alcaldes de Cancún, Isla Mujeres y Solidaridad, Paul Carrillo, Agapito Magaña y Mauricio Góngora, respectivamente, realizaron o simularon realizar de manera simultánea sesiones de Cabildo para aprobar la ampliación de la concesión y la privatización del servicio, siguiendo instrucciones del Gobernador Roberto Borge, quien posteriormente obtuvo la aprobación del Congreso local por la vía rápida. Pero el acuerdo se trató de mantener ocultó e, incluso, los medios locales fueron ‘persuadidos’ a ni siquiera publicar la información, lo cual contribuyó a la confusión que ha prevalecido en este tema.

Esta semana, sin embargo, finalmente se conocieron las primeras cifras de uno de los negocios más oscuros del gobierno en Quintana Roo, lo que permite confirmar que con la entrega de la concesión del servicio en el municipio de Solidaridad, se vendió a la ‘gallina de los huevos de oro’ a cambio de muchos menos dinero que lo que el estado recibiría si continuara prestando el servicio, es decir, un negocio inexplicable en el que sólo sale ganando la empresa Aguakán.

Hace dos días, se publicó que la empresa Aguakán pagó mil 80 millones de pesos al gobierno del estado como contraprestación por obtener la ampliación de la concesión en Cancún e Isla Mueres y la concesión por primera vez en Solidaridad, sin que se sepa en manos de quien quedó ese dinero porque, al menos en los estados de cuenta de la CAPA, no aparecen.

Hoy, de acuerdo con documentos obtenidos que detallan la operación de CAPA, se sabe además, que cada año la empresa Aguakán pagará una contraprestación que inicialmente se fijo en 120 millones de pesos anuales, pero al mismo tiempo se obtuvieron informes que confirman que ese dinero representa una cantidad menor a la que recaudaba este organismo en Solidaridad cada año.

En el año 2014, según estos reportes, el municipio Solidaridad recaudó 293 millones 303 mil pesos, un poco menos de los 325 millones presupuestados.

Descontando los gastos de operación por 88 millones 396 mil pesos, la ganancia neta de CAPA en Solidaridad en 2014, cuando su directora era Paula González Cetina, fue de 204 millones 907 mil pesos.

Aún así, considerando únicamente los organismos operadores del servicio de agua potable, la recaudación de Solidaridad representaba el 50 por ciento del monto total de lo recaudado en todo el estado donde operaba CAPA.

De hecho, salvo los casos de Solidaridad, Cozumel y Tulum, en todos los demás municipios, CAPA opera con perdidas, ya que en el caso de Othón P. Blanco, Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos y Lázaro Cárdenas sus gastos de operación son superiores a su recaudación.

Sólo para ejemplificar, el municipio de José María Morelos únicamente representaba el 1.5 por ciento del total de la recaudación con sólo 7 millones 292 mil pesos en ese 2014, pero sus gastos de operación superan los 15 millones de pesos en el mismo periodo.

En OPB, la recaudación de CAPA en 2014 fue de 119 millones de pesos, pero sus gastos ascendieron a 154 millones 963 mil pesos. En Lázaro Cárdenas se recaudó 10 millones 457 mil pesos, pero se gastó 17 millones 665 mil pesos en la operación, mientras que en Felipe Carrillo Puerto se recaudó casi 13 millones de pesos, pero los gastos de operación fueron superiores a los 26 millones de pesos.

Todo esto sin contar con que la operación de la Dirección General de CAPA también está subsidiada, ya que su recaudación representa apenas un 50 por ciento de sus egresos y es allí donde hay una gran fuga de recursos, en su mayor parte para pagar la burocracia.

En 2014, CAPA recaudó en todos los municipios, incluyendo los ingresos de la Dirección General, un total de 877 millones 944 mil pesos, pero sus gastos de operación ascendieron a mil 61 millones de pesos, lo que significa que, con todo y los ingresos extraordinarios que esta dependencia obtenía en Solidaridad, arrastraba un déficit, al menos en ese año, de 183 millones 241 mil pesos.

Para el 2015, en el estimado del Programa Operativo Anual (POA), CAPA había previsto recaudar tan sólo en Solidaridad 324 millones 353 mil pesos, pero ese dinero ya no ingresó a las arcas estatales por la concesión otorgada en diciembre del 2014 a la empresa Desarrollos Hidráulicos de Cancún que tiene como filial a Aguakán.

Ya sin los ingresos de Solidaridad, es evidente que CAPA ha enfrentado mayores problemas para poder subsidiar la operación de este organismo en los municipios donde la recaudación histórica siempre ha sido menor a los gastos de operación.

De acuerdo con una solicitud presentada ante la Unidad de Transparencia y Acceso a la Información Pública del Poder Ejecutivo, instancia que no reconoció el pago revelado por la propia empresa Desarrollos Hidráulicos de Cancún por mil 80 millones de pesos, el dinero a recibir por la concesión será el equivalente a la cantidad que resulte mayor entre:

1. El 10 por ciento de los ingresos totales anuales de la concesionaria (incluyendo las tarifas por aportación para obras de cabecera por dotación de litros por segundo)
2. 120 millones de pesos anuales ajustados al índice Nacional de Precios al Consumidor, hasta el 31 de diciembre del 2053.

Es decir, cada año, CAPA recibirá como mímimo 120 millones de pesos como contraprestación o un poco más si el 10 por ciento de los ingresos totales anuales de la concesionaria superan esta cifra, lo que, de entrada, significa que, tomando en cuenta los ingresos del 2014, que fue el último año en que Solidaridad estuvo bajo control del gobierno, esta dependencia dejará de recibir poco más de 80 millones de pesos, sin contar con que Solidaridad es una ciudad en expansión que cada año representará mayores ingresos.

Según la información obtenida a través de Transparencia, con base a lo que dispone el artículo 22 de la Ley de Agua Potable y Alcantarillado del Estado de Quintana Roo, la totalidad de los ingresos recibidos serán invertidos para el cumplimiento de los objetivos de la CAPA en los municipios de Quintana Roo, aunque eso representa menos dinero que los que CAPA podría haber obtenido manteniendo bajo su control el servicio del agua en un municipio estratégico como Solidaridad. (Noticaribe)

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