COZUMEL, 26 de agosto.– Regidores del Ayuntamiento de Cozumel se excusaron por su inasistencia a la LXX sesión ordinaria de Cabildo, que no se llevó a cabo precisamente por falta de quórum legal, ya que destacaron que desconocían el contenido de una iniciativa de decreto enviada para su aprobación y por la cual se convocó a una sesión extraordinaria a puerta cerrada, negando que hayan exigido un bono de fin de trienio.
La regidora Geny Canto Canto, presidenta de la Comisión de Deportes, afirmó que por razones personales no pudo asistir a la LXX sesión ordinaria, lo cual en su momento informó, aclarando que el día de ayer fueron dos las sesiones, una ordinaria y otra extraordinaria, las que no se llevaron a cabo.
Con respecto a la sesión extraordinaria, la concejal señaló que aún no saben de qué trata la reforma que el Congreso del Estado envió para su aprobación, por lo que no pudo opinar al respecto; sin embargo, negó que algunos regidores se hayan puesto de acuerdo para boicotear la sesión de Cabildo como medida para exigir un bono.
Por su parte, el regidor Roberto Olán Carrera, presidente de la Comisión de Asuntos Agropecuarios, refirió que en días pasados, les entregaron la citación para la LXX sesión ordinaria, que sería abierta al público, mientras que el mismo jueves les informaron sobre la sesión extraordinaria, en la que se solicitaba la aprobación para reformas a artículos de la Constitución del Estado.
Dijo que la invitación llegó a destiempo, lo que llamó la atención de los regidores pues no se informó concretamente sobre los puntos que contenía la iniciativa enviada por el Congreso del Estado, por lo que se solicitó al secretario general, Roberto Marín Flores, que se cite a una sesión de pre cabildeo y que entregue el cuadernillo con los puntos a tratar, lo cual desafortunadamente no se hizo.
Recordó que el pasado mes de junio, también se dio una sesión extraordinaria en la que no se aprobó un paquete de reformas que el Ejecutivo había mandado, por lo que no quisieron que ocurra lo mismo, destacando que en ese entonces se dio un altercado con ciudadanos que acudieron al palacio municipal para quejarse por este tema.
El concejal mencionó que su inquietud fue porque no se otorgó la información adecuada, razón por la que no asistieron a la sesión extraordinaria, aunado a que dos de sus compañeras regidoras informaron que estaban enfermas.
Por último, calificó como lamentable el hecho de que, de forma dolosa, alguien en el Ayuntamiento filtró el tema de que los regidores exigían algún bono, lo cual, consideró, fue una represalia por no asistir a la sesión extraordinaria en la que se trataría el tema de las reformas enviadas por el Estado. (Fuente: Diario de Quintana Roo)
