Si bien Morena y el PES forman parte de una coalición nacional, esta alianza podría perjudicar a Encuentro Social en las elecciones municipales, en donde este partido va solito.
Y es que se estima que Andrés Manuel López Obrador superará el 60 por ciento de los votos en Quintana Roo. La proporción es enorme al grado que los partidos chicos terminarán muy afectados.
En la mayoría de los municipios, señalan los enterados, el PES está último lugar, incluso por debajo de candidatos independientes.
El PES tiene un ‘voto duro’ en Quintana Roo derivado, entre otras cosas, de la fuerza de la estructura que ha sostenido Gregorio ‘Greg’ Sánchez durante años y que tiene seguros entre 35 mil a 40 mil votos.
Pero este voto duro se empequeñece por la enorme cantidad de votos que habrá en la jornada del 1 de julio, derivados de la enorme expectativa de la elección presidencial y del formidable arrastre de López Obrador en Quintana Roo.
Se requiere cuatro por ciento para acceder a los cabildos, y la posibilidad de alzar o superar este porcentaje se vuelve muy complicado ante los tremendos números en la participación esperados.
Muy probablemente el PES, de la mano de Lopez Obrador, gane un buen número de diputaciones federales y hasta senadurías, pero en Quintana Roo podría perder regidurías con relación a las que actualmente tiene.
