PLAYA DEL CARMEN, MX.- Subió el telón del Festival Internacional de Cine Cancún-Riviera Maya, con lo que la maquinaria de la imaginación y los sueños inició su marcha por segundo año consecutivo.
Pedro Valiente, el director del Festival, fue breve en su comentario, pero emotivo. El cineasta citó a Juan Rulfo y a Dulce María Loynaz para contar cómo su sueño se hizo Festival.
Francisco Córdova Lira, director asociado del Festival Internacional de Cine, hizo gala de elocuencia: “de niño aprendí el reconfortante arte de agradecer” dijo cuando reconoció el trabajo de los organizadores del Festival, de las autoridades y de los patrocinadores.
Luego, siguió contando: “más tarde aprendí a soñar, no el sueño tranquilo, sino el sueño de la vida; soñé en ese sueño diario que es Quintana Roo, que me ha dado tanto”, añadió Córdova Lira.
El hombre, el empresario, es también un amante del cine, un amante con razones suficientes, y el Festival es un homenaje a su padre, el actor mexicano Francisco Córdova, y a su hija Natalia Córdova: “con este Festival soñé a mi padre y a mi hija, dijo emocionado”.
Francisco Córdova recordó que en la cita del año pasado, en ese mismo lugar y por estos mismos días, prometió que él no dejaría este Festival hasta que llegara al número 10, y “este es el segundo”, comentó orgulloso.
Por su parte, el gobernador de Quintana Roo, Félix González Canto, recordó la estrecha relación entre René García, el padre del actor cubano americano Andy García, cuando aquél visitaba Cozumel décadas atrás.
Fue María Teresa García, hermana del laureado actor, la encargada de agradecer el homenaje que el Festival dedica a Andy García. Teresa García también recurrió a la memoria para rescatar los recuerdos que guardaba de Quintana Roo, y de Cozumel, cuando la Isla era un “chinguirito”, de tan pequeña.
La presencia de Andy García fue posible sólo a través de la tecnología. En un video el actor presentó su opera prima: La ciudad perdida, una historia del exilio cubano que el actor sintetizó así: “somos producto de esta historia, exiliados, víctimas de la tragedia, de la ilusión ‘rompida’; de una promesa de libertad”.
Fue con esta ópera prima y con la entrega de un reconocimiento a la actriz Angélica Aragón por su trayectoria, que dio inicio el Segundo Festival de Cine de Cancún.
Patricia Llaca y Vladimir Cruz fueron los encargados de conducir la apertura del Festival. (Noticaribe)