CANCÚN, MX.- La polémica por la posible construcción del proyecto Punta Carey a un costado del Santuario de la Tortuga Marina de Xcacel-Xcacelito rebasó ya las fronteras de México.


La Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA) envió una carta al titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Rafael Elvira, para solicitarle que evalúe el proyecto impulsado por el Fideicomiso Punta Carey de acuerdo con una serie de parámetros que incluyen el respeto a protocolos signados por el gobierno mexicano que protegen no sólo a las tortugas, sino también a los manglares.
Incluso, la agrupación advierte en la citada carta, cuya copia obra en poder de El Periódico, que “por la fragilidad de la zona y el grave impacto que puede provocar este proyecto, queremos resaltar que su autorización implicaría para México la violación de tratados internacionales de los que es parte, así como de la legislación y reglamentación nacional vigente”.
Dichos tratados serían la Convención para la Diversidad Biológica (CDB), que habla sobre el compromiso de los firmantes (países) a tomar medidas especiales para promover y garantizar un desarrollo ambientalmente adecuado y sostenible en zonas adyacentes a las áreas naturales protegidas.
Otro es la Convención sobre los Humedales de Importancia Internacional Especialmente como Hábitat de Aves Acuáticas.
“Por ser parte contratante de RAMSAR la obligación de México consiste en mantener las características ecológicas de estos humedales de importancia internacional y planificar el uso racional o uso sostenible, de los mismos.
“El estado estaría incumpliendo si otorga la autorización de desarrollo a este proyecto, que pondría en peligro la playa Tortuguera Xcacel-Xcacelito, ya que la construcción de los canales planteados desviaría el flujo de agua que actualmente alimenta a los manglares”, se indica.
Uno más sería la Convención Interamericana para la Protección y la Preservación de la Tortuga Marina (CIT), que obliga a la protección, conservación y recuperación de las poblaciones de tortugas marinas y sus hábitats.
AIDA es una agrupación con orientación legal ambiental internacional que trabaja a lo largo del continente americano con nueve organizaciones en distintos países con la misión de fortalecer la capacidad de las personas para garantizar su derecho individual y colectivo a un ambiente sano.
Para lograrlo se enfocan en cinco temas estratégicos, uno de los cuales es la protección a la biodiversidad marina y costera a fin de fortalecer la protección de ecosistemas frágiles y de especies marinas que se encuentren en peligro.
En su argumentación cita que además de que la playa Xcacel-Xcacelito es la de mayor anidación de tortuga blanca y caguama en el Atlántico, su manglar es de importancia internacional al haber sido registrada por el gobierno mexicano ante la Secretaría de Ramsar.
“La construcción de diversos canales artificiales proyectados podría dañar irremediablemente el sistema hidrológico del manglar”, advierte.
“Por todo lo anterior, recomendamos al gobierno de México y particularmente a la Semarnat que considere los argumentos antes expuestos y tome las medidas necesarias para asegurar la protección efectiva de la biodiversidad y hábitat que se encuentran en la playa tortuguera Xcacel-Xcacelito; y por tanto que México cumpla con sus obligaciones legales nacionales e internacionales aplicables”, concluye la misiva. (Fuente: El Periódico)

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