CHETUMAL, MX.- La caída de otro plafón en el edificio de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural e Indígena revela las deplorables condiciones en las que se encuentran algunos inmuebles antiguos de la administración pública, entre los que se incluye al propio Palacio de Gobierno.
Es la segunda ocasión en menos de seis meses que una parte del techo de este edificio se desprende, aunque contrario a la primera vez, no hubo lesionados.
De haber llegado antes de las 8 horas a las instalaciones de la Subsecretaría de Agricultura, por lo menos dos empleados estarían en el hospital recibiendo la atención médica a consecuencia de las heridas que hubieran sido ocasionadas por los dos metros cuadrados de concreto que se cayeron sobre sus sillas, escritorios y computadoras.
Gabriel Mendicuti Loría, titular de la dependencia, reconoció el grave riesgo que corren alrededor de 120 burócratas, al señalar que no hay presupuesto para cambiarse a otro edificio, “es una propuesta que hemos sugerido, pero aún no se nos autoriza”, señaló.
Recordó que hace unos meses la Secretaría de Infraestructura y Transporte realizó un análisis del edificio y “en teoría no representa ningún riesgo grave, salvo los plafones que revisaremos a conciencia”, se comprometió.
El 27 de septiembre de 2009, el plafón de la zona administrativa se desprendió en horas de trabajo. Tres empleados resultaron con algunas contusiones, mientras que el resto de la plantilla laboral desalojaba el edificio por recomendación de personal de la Dirección Estatal de Protección Civil.
Ese día fue justo en el que Mendicuti Loría recibió las instalaciones, tras el enroque de funcionarios estatales por instrucciones del gobernador Félix González Canto.
Según el departamento de Comunicación Social de la Sedari, el monto de los daños asciende a siete mil pesos, considerando el equipo y mobiliario dañados por el escombro.
Y contrario a lo que este mismo departamento afirmó, los trabajadores de la Subsecretaría de Agricultura aseguraron que los equipos sobre los que se cayó este material estaban en pleno funcionamiento.
Luego del incidente, se levantó un acta administrativa, en tanto Protección Civil revisa las condiciones del inmueble para prevenir futuros riesgos.
Cabe mencionar que este edificio tiene más de 30 años de antigüedad y al igual que otros inmuebles como el Palacio de Gobierno, requiere de mantenimiento estructural, que disminuya los riesgos de accidentes como el que se registró ayer. (Fuente: SIPSE/Novedades de Quintana Roo)
