CANCÚN, MX.- Javier Coello Trejo -abogado de Steve Santander en las demandas contra Gregorio Sánchez Martínez- espera que en los próximos días la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal consigne uno de los expedientes y se libere orden de aprehensión contra el presidente municipal de Benito Juárez por cargos, ya probados, de falsedad en acusaciones y, a la vez, la Procuraduría de Justicia de Quintana Roo lo cite a declarar en la averiguación previa por un fraude que sumaría, a la fecha, casi veinte millones de dólares.


Entrevistado en exclusiva por la periodista Lilia Arellano durante el programa Estado de los Estados, Coello Trejo detalló ampliamente el caso de las acusaciones contra Gregorio Sánchez a raíz de un préstamo de 10 millones de dólares que recibió de Santander para financiar su campaña a la presidencia municipal, y por el cual firmó diez pagarés por un millón de dólares cada uno aunque, a razón de los intereses, habrían duplicado ya su monto.
P: Con los intereses y los gastos, la deuda de diez millones, ¿más o menos como por cuánto va?-, interrogó Lilia Arellano.
R:
Imagínese, son cinco por ciento mensual, pues es un mundo de dinero. Yo no entiendo qué pasó con el señor Greg. Él sabe perfectamente que los firmó, él sabe que recibió los dineros, él sabe que recibió la publicidad, él sabe que fueron las edecanes… Bueno, hay firmas de él recibiendo las camionetas. ¿También son falsas?.. Lo digo con todo respeto, el señor estuvo pésimamente mal asesorado. No sé quiénes sean sus abogados, no los conozco, pero bueno…
P: Usted si hubiera sido su abogado qué le hubiera aconsejado: ¿paga?
R:
El abogado es como el cura: hay que confesarle. Si yo quiero hacer una estrategia de defensa, requiero que mi cliente me diga la verdad. Porque si no, voy a abordar mi defensa con mentiras. ¿A qué voy a llegar? A perder. Esa es la realidad.
P: Ahora, Gregorio está metido en todo esto como aval.
R:
Como deudor solidario.
P: Licenciado: hay una denuncia penal que usted presenta aquí mismo en Quintana Roo.
R:
Mire Lilia. El señor, días después de haber sido embargado, trata de dilapidar los bienes. Los dona a su hijo, constituye un fideicomiso, y eso, técnicamente, se llama fraude. Ante esa situación, obviamente yo presento denuncias ante la Procuraduría de Justicia del estado de Quintana Roo.
P: O sea, ya hay dos acusaciones de fraude. Una, la que presenta él y que se le revierte, y esta otra, que usted presenta.
R:
Que es la más grave. Imagínese tratar de dilapidar los bienes embargados por un juez federal. El que está embargado no puede vender ni puede transmitir la propiedad a nada. Entonces es un fraude. Se presentan las denuncias. Ya fueron ratificadas. Lo único que le hace falta a esas denuncias es que el Ministerio Público del Fuero Común en Quintana Roo, en Cancún, cite a declarar al señor Greg y ejercite la acción penal. Y yo le pido, le pido ahorita al señor procurador, a quien conozco y sé que es una gente muy honesta que actúe en consecuencial. Y mire: yo lo reitero; no es nada personal.
P: Ni personal ni político.
R:
Menos político. Simple y sencillamente es que la justicia y la ley tienen que aplicarse parejo. Tan grande, tan chico como sea, quien delinque, quien comete errores, quien viola la ley, debe ser castigado. Y mire Lilia, a través de mi vida profesional he tenido en mi mano casos muy fuertes. Pero honestamente, este caso calló en el absurdo. Yo estoy de acuerdo, todo mundo tiene derecho de defensa, pero no con mentiras tan evidentes como éstas. ¿Quién le aconsejó al señor presidente municipal que los bienes embargados los tratara de dilapidar? El señor vendió, dio en fideicomiso sus bienes, violó la ley, está plenamente probado. Usted tiene copias de las denuncias, ahí están los números de las averiguaciones, están ante la Procuraduría del estado de Quintana Roo, y lo único que falta es citarlo y ejercer la acción penal. Hay que ejercitar la acción penal porque es la única manera como vamos a entender que ya no estamos en épocas de delinquir tan fácilmente. Así lo pienso yo. Así lo pregona el presidente de la República. Así lo sostiene el señor gobernador del estado. Y obviamente, el procurador. Ahí están las pruebas.
P: Todo esto, ¿le impide a Gregorio Sánchez ser candidato a la gubernatura? ¿Le impide el registro?
R:
El registro le impediría que fuese consignado. Lo que sí creo que le impide es la calidad moral como para decirle al pueblo de Quintana Roo: te voy a gobernar. Pero ese no es mi problema. Yo soy un abogado.
P: Entre las elecciones y la llegada al poder transcurrirían nueve meses. Si en ese inter hay alguna sentencia por parte de la Procuraduría General de la República o de la Procuraduría del Distrito Federal, con relación a sus fraudes, o lo que tiene pendiente la Procuraduría del estado. ¿Esto también le impide llegar al poder?
R:
Obviamente. Acuérdese usted que uno de los requisitos es no tener antecedentes penales.
P: ¿Como de cuánto estamos hablando ya al final?
R:
Pues vamos a estar hablando como de unos veinte millones de dólares. Yo no le dije que los firmara Lilia. Ahora, él recibió el dinero. Recibió todo. Mi cliente me acreditó todas las cantidades de dinero que le entregó… Mire Lilia, en esta profesión nuestra, cuando se dice una mentira, para sostener esa mentira hay que decir 30, y luego 60, y luego 90… Qué pasa con el señor Greg… Yo le preguntaría a él cómo supo el señor Steve Santander el número de cuenta de su mamá. Solamente él se lo pudo haber dado. Cómo hay mails en donde Alfredo Achard le habla con una gran familiaridad a Steve y le pide que le mande cuatro kilos, o sea cuatro millones. Cómo reciben camionetas, carros, propaganda…
P: Tengo aquí algunos documentos en donde incluso se pagan edecanes, clase triple A…
R:
Así es…
P: Y estaban caritas, ¿eh?
R:
El público puede ver qué despliegue se hizo en la campaña de Greg. Edecanes que estuvieron repartiendo… Ahí están, agencias de modelos que contrató este señor… Las pruebas son evidentes, pues. Si yo suscribo un pagaré, en el mismo pagaré se dice RECIBÍ… Nadie le puso una pistola al señor Greg para que los firmara. Él los firmó, tengo entendido, así me lo indicó mi cliente, en la casa del señor en Cancún…
P: En La Isla…
R:
Sí.
P: ¿Y cómo es que Alfredo Achard acepta firmar, él como deudor, los pagarés?
R:
Porque según me informa Steve el señor Greg le dijo: no, tú fírmalos y yo soy el aval, yo los pago… ¿Cómo los iba a pagar?… Yo lo que pienso Lilia; no me lo ha dicho mi cliente… Es con trabajo, yo te voy a dar trabajo y yo te pago así. Perfecto. ¿Qué pasa? Que cuando el señor Greg gana la presidencia municipal, el señor Steve Santander le habla y le dice: oye, yo te ayudé, yo te presté, yo te di, yo te envié… Y no le vuelve a contestar el teléfono. Y Alfredo Achard se hace ojo de hormiga.
P: ¿Y niegan que sean sus firmas?
R:
Sí. Alfredo Achard niega que es su firma pero lo más grave de esto Lilia es que el señor presidente municipal y Alfredo Achard presentan una denuncia penal en la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, a donde acusan a Steve Santander, al señor Nava, a su servidor, a mis abogados, de fraude… Pues a mí me extraña. Radican la averiguación. Viene el señor Greg. Viene el señor Achard. Ratifican. Hacen suya la denuncia de un abogado de ellos bajo protesta de decir verdad. Imputan. Y la Procuraduría del Distrito sigue su trámite. Y mandan a hacer el primer dictamen. Obviamente, si yo digo no es mi firma, el Ministerio Público en investigación de los hechos ordena el dictamen en materia de grafoscopía. Hacen el dictamen Lilia, y resulta que los peritos de la Procuraduría dicen, sí es la firma.
“Él comete un error. No debió meterse en el ambiente penal, porque venir a imputar hechos falsos… El código penal del Distrito Federal prevé como delito que aquel que ante el Ministerio Público impute hechos falsos, se le aplicará la misma pena del delito que acusó. O sea, si él está acusando de fraude y yo le demuestro, como ya le demostré, que el señor mintió, pues ahora la Procuraduría del Distrito tiene que consignarlo. ¿Por qué? Porque la Procuraduría del Distrito es la que determina en la averiguación previa Lilia, que sí es su firma. No solamente un perito, sino el supervisor de supervisores de peritos, porque él viene, se queja con el procurador y el procurador le dice: mire señor presidente municipal yo no estoy casado, a lo mejor el perito se equivocó, ¿qué pide usted? Que lo revise el supervisor. Va otro dictamen y el supervisor de peritos dice: es la firma, tanto de Achard como del señor Greg”.
P: Ahora dice que todo esto corresponde a una guerra sucia.
R:
Le hago una pregunta Lilia con todo respeto: este asunto nace en el 2008. Ya en el 2008 el señor pensaba ser gobernador. Esto no es político. Yo creo que se subió a un estadio a donde no debió haberse subido. Ni yo soy político. Fui, Lilia. Fui. Más bien fui funcionario público no político, porque si hubiera sido político a lo mejor hubiera yo seguido. Pero no es político. Aquí el PRI, el PAN, el PRD, es otra bronca. Éste es un aspecto eminentemente jurídico. En el aspecto penal, Lilia, el señor le mintió al Ministerio Público y ése es un delito. (Fuente: El Periódico)

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