CANCÚN, MX.- Luego de que fue construido el puente a desnivel en el bulevar Colosio y fuera retirada la primera torre de control que se utilizó en este destino, y que se volvió símbolo de los inicios de la actividad turística en esta ciudad, con motivo del 40 aniversario, se volverá a colocar dicha estructura donde originalmente estaba, y que ahora ocupa la glorieta de “Los Camastros”.
El Comité Organizador para los festejos de los 40 años de Cancún presidido por María Concepción Castro López, informó que el gobierno del estado, a través del secretario de Gobierno, Eduardo Ovado Martínez, se comprometió a la reinstalación de la réplica de la torre de control del antiguo aeropuerto de Cancún, símbolo de los orígenes de la ciudad.
El funcionario estatal anunció a los pioneros de Cancún, que volverán a tener su torre de control en el mismo sitio en donde se encontraba hasta finales de 2008 cuando fue desmontada por los trabajos del distribuidor vial.
Aunque en un principio no se contemplaba su inclusión por tratarse (la glorieta del distribuidor) de una obra modernista, bautizada popularmente como “Los Camastros”, la insistencia de los grupos pioneros de la ciudad por la recuperación del símbolo, sensibilizó al gobierno, dijo la presidenta de comité, quien afirmó que la orden de la reinstalación viene directamente del gobernador, cuando falta mes y medio para la celebración de la fundación de la ciudad, el próximo 20 de abril.
Dijo que es tal la importancia de dicho símbolo, que precisamente el logotipo oficial de los festejos del 40 aniversario de la ciudad de Cancún, incluye, como parte esencial, la figura de la antigua torre de control.
Para llevar a cabo esta nueva réplica, se utilizará el diseño y planos, del ingeniero Manuel Castro López, constructor de la torre original y de la réplica, realizadas en 1970 y 2002.
A modo de recordatorio, fue en 1970, que los creadores de este destino turístico rehabilitaron una antigua aeropista, construida a mediados del siglo pasado, para recibir a los primeros aviones con los primeros inversionistas al Proyecto Cancún.
Ese aeropuerto fue dotado de instalaciones completamente de palma: la sala de espera, las oficinas y la torre de control, pues los promotores quisieron darle a Cancún un toque caribeño y echaron mano de los palaperos de la región, a fin de acentuar las raíces mayas, ya que ese detalle histórico nos hacía diferentes al resto de los destinos turísticos del Caribe.
La torre de control, construida de palma de huano y maderas de zapote y nacax, tenía una altura de 15 metros. Esta edificación sobrevivió por espacio de 10 años, hasta que fue desmantelada.
A principios de 2002 la empresa Aerocaribe, financió parte de la construcción de la réplica de la torre de control.
La diferencia entre la original y la réplica, es que la segunda tiene una estructura de acero que le permite soportar vientos huracanados hasta en grado 5.
El huracán Wilma, en octubre de 2005, no tiró la torre de control, sin embargo la falta de mantenimiento que correspondía a la administración municipal dejó morir este símbolo.
Por lo que ahora, el gobierno del estado, llevará a cabo la tercera réplica de este símbolo de los inicios de Cancún. (Fuente: El Periódico)