CANCÚN, MX.- La vertiginosa expansión de fraccionamientos que se ofertan como ecológicos y que en realidad carecen de los permisos correspondientes para desarrollarse en la llamada “Ruta de los cenotes”, entre Puerto Morelos y Leona vicario, amenaza con provocar “una catástrofe” debido a su proximidad con el Aeropuerto Internacional de Cancún, alertó el Instituto Municipal de Planeación (IMPLAN).
El director de dicho organismo Carlos Díaz Carvajal, indicó que la venta y notificación de terrenos ejidales en la “Ruta de los cenotes”, cercanos a Central Vallarta, para el desarrollo de fraccionamientos supuestamente “ecológicos”, constituye un foco de alerta.
Además de que no cuentan con permisos de comercialización, por lo cual su venta genera incertidumbre jurídica para los compradores; se localizan en un perímetro cercano a las pistas de despegue y aterrizaje del aeropuerto, lo que podría ocasionar a futuro un accidente.
El funcionario hizo pública la situación frente a arquitectos, ingenieros, académicos y autoridades municipales semanas atrás, durante uno de los foros de reflexión organizados a propósito del 40 aniversario de la fundación de Cancún.
Ante los asistentes, subrayó que este tipo de desarrollos, carentes de permisos para comercializarse, ejercen una fuerte presión sobre el acuífero de la zona, lo cual constituye otro riesgo potencial para el agua potable del sitio.
“Y hay algo más grave todavía. El riesgo potencial por la ocupación de terrenos próximos a la carretera poniente de las pistas del Aeropuerto Internacional de Cancún, como resultado de la venta de terrenos ejidales propiciando el surgimiento de asentamientos humanos irregulares”, dijo.
Díaz Carvajal alertó acerca de que la “Ruta de los cenotes” se está convirtiendo en “un negocio inmobiliario”, digno de una investigación por parte de los tres órdenes de gobierno y de acciones aplicadas por cada autoridad, pues los terrenos se ofertan en miles de pesos, sin enganche, sin permisos, en una zona no apta para el desarrollo urbano y en franca violación al Programa de Ordenamiento Ecológico Local (Poel).
El punto es que la suma de intereses que ahí confluyen es vasta. Un par de meses atrás, la Dirección General de Ecología de Benito Juárez fue blanco de toda una campaña de linchamiento mediático por clausurar desarrollos habitacionales localizados en esa área.
Se trataba del desarrollo Silver Sky. Sus promotores, afiliados a el Consejo de Desarrollos Ecoturísticos e Inmobiliarios de Quintana Roo, incluso se manifestaron en contra de la titular de la dependencia, Graciela Saldaña Fraire, afuera de sus oficinas, acusándola de intervenir sin poseer facultades para ello.
Sin embargo, el ayuntamiento de Benito Juárez, como parte del convenio de coordinación signado con el gobierno estatal y federal, para formular, elaborar, aprobar y publicar el Ordenamiento Ecológico vigente, tiene el compromiso de velar por el cumplimiento de dicho instrumento de política ambiental a través de la Dirección General de Ecología.
A la fecha, la “Ruta de los cenotes” lleva cinco años desarrollándose y existen más de 200 fraccionamientos comercializándose, de acuerdo con los datos que los propios promotores otorgaron a la autoridad municipal.
De este modo, sitios como Mayan Sky, en la “Ruta de los cenotes”, se ofertan como sitios con “alta plusvalía” y “entorno ecológico único”, en el kilómetro 23.5.
De acuerdo con la delegación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en Quintana Roo, así como la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) de la misma dependencia, no existe evaluación en materia de impacto ambiental del proyecto denominado Mayan Sky”, promovido por Mar García Méndez. (Fuente: El Periódico)