MEXICO.- Gregorio Sánchez Martínez, candidato de PRD, PT y Convergencia a la gubernatura de Quintana Roo, es el cuarto miembro de una familia que ha tenido que enfrentar acusaciones directas de la Procuraduría General de la República (PGR), debido a que, en distintas épocas, han sido acusados dos de sus hermanos y un cuñado de delitos de delincuencia organizada y lavado de dinero, según publica Excelsior en su edición impresa.
La PGR confirmó que en 2004 fue detenida y procesada por lavado de dinero Magdalena Sánchez Martínez y su esposo, Carlos Gasca Sánchez, tras haber sido aprehendidos en el Aeropuerto de la Ciudad de México procedentes de Colombia, al tratar de introducir 300 mil dólares en efectivo, por lo que estuvieron presos tres años en El Altiplano.
Otro de sus hermanos, Feliciano Sánchez Martínez, fue acusado por la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) por el delito de privación ilegal de la libertad en la modalidad de secuestro, por lo que se encuentra preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México, al presuntamente encabezar una banda de secuestradores denominada Los Villaverde.
El hermano de Greg Sánchez fue detenido en marzo de 2008, por elementos de la Policia Federal, tras liberar a un comerciante de 44 años y su hijo de 15. De acuerdo con la PGR, esta banda de secuestradores operaba en el Distrito Federal y el Estado de México, por lo que el Juzgado 17 en procesos penales federales dictó auto de formal prisión a Feliciano Sánchez Martínez El Chanoc y siete cómplices en 2008, y actualmente están a la espera de sentencia.
Feliciano estuvo preso entre 1988 y 1997 en el Reclusorio Oriente del DF por posesión de 700 kilogramos de mariguana.
Gregorio Sánchez Martínez es el onceavo hijo de un total de 14 hermanos.
Dentro de la causa penal 80/2009 del Juzgado Primero de Distrito en Procesos Penales Federales en Nayarit se establece que Gregorio Sanchez Martínez tenía relación con el grupo delictivo de Los Zetas a través del director de la cárcel municipal de Cancún, Marco Antonio Mejía López.
De acuerdo con el proceso penal, Mejía López, al fungir como director de la cárcel, permitía la libre operación de Martín Villanueva Vázquez, conocido como El Negro, quien dirigía el grupo denominado La Comitiva, perteneciente a Los Zetas.
El Negro era quien mantenía el dominio completo de la cárcel municipal; de ahí controlaba la venta y distribución de droga para Los Zetas cuando se desempeñaban como brazo ejecutor de la organización Cárdenas Guillén.
Las acusaciones de la SIEDO contra Villanueva Vázquez indican que también era el encargado del cobro a los presos para dejarlos vivir y, de no recibir la paga, los torturaba e incluso los mataba.
Además, de acuerdo con la SIEDO, El Negro fue otro de los responsables intelectuales de la ejecución del general Enrique Tello Quiñones, al seleccionar a los asesinos del militar, por lo que es acusado de delincuencia organizada y homicidio en grado de coparticipación.
El poderío de El Negro en el penal de Cancún era tal que custodios y municipales intentaron evitar su traslado a El Altiplano. (Fuente: SIPSE/Novedades de Quintana Roo con información de Excélsior )