CANCÚN, MX.- A la par de los delitos federales que se le imputan al candidato de la coalición PRD-PT-Convergencia, Gregorio Sánchez Martínez, existen agravios locales que le son reclamados por sectores de la población, como el caso de los defensores del “ombligo verde”, quienes lo ubican como responsable de la destrucción parcial de uno de los dos últimos pulmones de la ciudad, con el fin de edificar un nuevo palacio municipal y la llamada Plaza Bicentenario.


Por tal motivo, “los ombliguistas” celebraron ayer la aprehensión del alcalde de Benito Juárez con licencia, a quien le atribuyen violaciones a los derechos humanos, al marco legal ambiental y urbano, así como a la democracia que hoy implora.
“Estamos muy contentos de que finalmente lo hayan detenido. No hay que olvidar la serie de agravios que como alcalde cometió en contra de la ciudadanía, como la destrucción parcial del ‘ombligo verde’, uno de los dos últimos pulmones de la ciudad, que enfrenta un fuerte déficit de áreas verdes.
“Este señor se empeñó en llevar adelante un proyecto totalmente innecesario, para el cual no había presupuestado ni los recursos, por su sueño mesiánico de pasar a la posteridad a través de una obra que lo perpetuara con el paso del tiempo”, declaró Ricardo Lujambio.
Integrante del Colegio de Arquitectos y vecino de las supermanzanas 33 y 34, que conforman las ocho hectáreas del “ombligo verde”, indicó que a nivel nacional apenas se están dando a conocer hechos que son de todos conocidos a nivel local, como sus presuntos vínculos con la operación de las casas de espionaje, las violaciones a los derechos humanos y al marco legal.
“Y otras cosas que no se han mencionado, como la exigencia a empleados municipales para que entreguen sus credenciales de elector o copias, porque si no, no les pagan su quincena”, comentó.
La ex subdirectora de Ecología, Martha Abúndez, respaldó lo antes dicho y manifestó que en el caso de lo sucedido con el “ombligo verde”, algunos regidores que al principio votaron a favor del proyecto, fueron engañados con información falsa en cuanto a que la zona no tenía ningún valor ecológico-ambiental.
“El propio Julián Ricalde (candidato de la coalición PRD-PT-Convergencia-PAN a la presidencia municipal) comentó que era un tema que Gregorio Sánchez perseguía de manera personal como un logro político, porque él tenía el sueño de dar el Grito de Independencia en el ‘ombligo verde’; es decir, fue una de sus tantas locuras que la gente a su alrededor no tuvo la fuerza para hacerle entender que estaba mal”, señaló.
Entrevistada aparte, la bióloga se refirió a las recientes declaraciones de la esposa del empresario y cantante grupero, Niurka Sáliva, quien reclama respeto a la democracia, cuando Sánchez Martínez omitió escuchar a los opositores de la obra y por el contrario, los descalificó llamándoles “radicales” y “anarquistas”.
“El que la señora Niurka esté gritando por todo México que en Quintana Roo no se respeta la democracia, en parte tiene razón, porque en Cancún su esposo fue el primero en violentar la democracia porque nunca escuchó a la gente que se opuso a su capricho. Creo que ella debería ser más congruente y mesurarse”, expresó.
La memoria
Para llevar a cabo la construcción del nuevo palacio y la Plaza Bicentenario -obra actualmente suspendida por falta de dinero- el cabildo cambió el uso del suelo violentando el procedimiento que establece la Ley de Asentamientos Humanos.
Desde agosto del año pasado, Greg aseguraba que poseía todos los permisos cuando no había obtenido aún la autorización de impacto ambiental emitida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), ni el cambio de uso de suelo en terrenos forestales emitido por esa misma dependencia.
El cambio de uso de suelo expedido por la Semarnat fue otorgado en diciembre pasado, mientras que las obras iniciaron en enero del 2010 sin la autorización de impacto, cuyo trámite inició ante la dependencia federal tan sólo un día después de que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausurara los trabajos.
Más de una centena de quejas ciudadanas fueron interpuestas ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos en contra de Sánchez Martínez, quien alcanzó -según el organismo- el número más alto de denuncias en contra de un funcionario público a nivel estatal y también a nivel nacional, tratándose de un tema ambiental.
El 3 de marzo la comisión emitió una medida cautelar dirigida al entonces alcalde en funciones, ordenando la suspensión de las obras para edificar el palacio y la plaza, hasta tener todos los permisos.
Gregorio ignoró la petición y dijo que proseguirían los trabajos; a finales de ese mismo mes finalmente la Semarnat le otorgó la autorización faltante sobre aquella superficie que aún le restaba por deforestar.
Sin embargo, ante el asomo del proceso electoral, los costos políticos y también la carencia de recursos, anunció la suspensión provisional de la obra que incluso contó con la venia del obispo de la prelatura Cancún, Pedro Pablo Elizondo, que reconoció, obtuvo del ayuntamiento el financiamiento del proyecto ejecutivo y trámites para la construcción de otra Catedral -que sustituiría a la actual- en otro apartado del “ombligo verde”. (Fuente: El Periódico)

Comentarios en Facebook