TULUM, MX.- Sin resultados por parte de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) a través la Policía Judicial en Tulum, el caso del millonario robo cometido en contra de ocho investigadores, buzos y exploradores alemanes.
La Embajada de República Federal de Alemania exige el pronto esclarecimiento de la investigación que lleve a la detención de los responsables y la recuperación, no solo de la valiosa información de la en las computadoras, sino también del equipo valuado en más de un millón de pesos.
Lo anterior lo informó la mañana de ayer la séptima regidora de la comisión de turismo, Euterpe Alicia Gutiérrez Valasis.
“La embajada de Alemania en México reiteró su preocupación por el robo que sufrieron sus connacionales en esta ciudad de Tulum, sin embargo su representante en la ciudad de México, ya me ratificó su confianza en que pronto se esclarecerán los hechos”.
Ante esto dijo que como regidora de la Comisión de Turismo le corresponde buscar un acercamiento con el Procurador de Justicia, Francisco Alor Quesada, para que se agilicen las investigaciones, pues dijo que el escándalo está trastocando fronteras y que sin lugar a dudas ya dañó la imagen de Tulum.
Como se recordará el pasado 28 de septiembre dimos cuenta de un millonario atraco cometido en agravio de un grupo de buzos e investigadores alemanes, quienes por varios años han explorado los ríos subterráneos más grandes del mundo.
A los científicos no sólo les robaron sofisticados equipos que consisten en cámaras acuáticas, equipo de cómputo, entre otros, valuados en más de un millón de pesos, sino que igual en las computadoras y memorias USB, los ladrones se llevaron información valiosa de muchos meses de trabajo, según consta en el expediente con número de Averiguación Previa PGJE/DRAPRM/AMP7/TULUM/698/2010, por el delito de robo y lo que resulte responsable.
Las víctimas responden a los nombres de Florian Huber, Ulrich Kunz, Christian Howe, Robert Lehmann, Marlen Karolczak Ann, a quienes al menos los hampones les llevaron seis computadoras portátiles, cámaras e infinidad de objetos de valor, todo ello valuado en más de un millón de pesos. (Fuente: SIPSE/Novedades de Quintana Roo)