TULUM, MX.- Luego de que en septiembre del 2008 la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró, parcialmente, el hotel Dreams Tulum (antes Solé Resort), este centro de hospedaje presentó una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) solicitando la regularización de su Centro de Convenciones y la autorización para la construcción de un jacuzzi, sin embargo, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), rechazó la solicitud el pasado 22 de octubre.
El centro de Convenciones del Hotel Dreams Tulum (Solé Resort) fue construido en el 2007, en lo que era el teatro del hotel, y la inversión del proyecto de remodelación fue de 12 millones 845 mil pesos, pero esta área, con una superficie de 2 mil 269 metros, fue clausurada por la Profepa, en septiembre de 2008, debido a que no contaba con la correspondiente autorización.
Ubicado a la altura del km. 236.7 de la Carretera Federal 307 Chetumal-Puerto Juárez, Tankah Riviera Maya, del municipio Tulum, el hotel Dreams Tulum es uno de los centros de hospedaje que se encuentran dentro del Parque Nacional Tulum, y en su solicitud el promovente de la regularización de la obra reconoce la clausura realizada por la Profepa en el 2008, y señala en su propia MIA que “esta obra del Centro de Convenciones fue inspeccionada por personal de la Profepa la cual dictaminó que no contaba con autorización en materia de impacto ambiental, (…) estableciendo en el término octavo, punto III del expediente número PFPA/SRN/DGIAZ/54/IA-010/08 la orden de someterse al procedimiento de evaluación de impacto ambiental respecto del centro de convenciones referido, atendiendo lo previsto en el artículo 57 del Reglamento de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente en materia de Evaluación del Impacto Ambiental”.
En su dictamen, la Profepa ordenó respecto de la obra, “la restauración del ecosistema del área que ocupa el Centro de Convenciones a su estado previo a dicha obra, aunque también estableció que dicha medida quedará suspendida y en su caso, no será ejecutada, si Dreams Tulum, (Solé Resort), obtenía la autorización de impacto ambiental.
Y dado que el promovente, Dreams Tulum (Solé Resort), pretendía la permanencia de la obra del Centro de Convenciones, presentó ante la Semarnat la correspondiente Manifestación de Impacto Ambiental, pero, el pasado 22 de octubre, la dependencia federal rechazó la solicitud de los desarrolladores.
En su dictamen del 2008, la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente estableció que en caso de no obtener la resolución favorable para la permanencia del Centro de Convenciones, el hotel Dreams Tulum (Solé Resort) debería elaborar y entregar a la Profepa, con copia a la Semarnat, un programa de demolición y retiro de la estructura, y restauración del sitio a las condiciones previas a su construcción. El promovente también reconoció esta posibilidad al momento de presentar su MIA, por lo que al haberle sido rechazada la autorización por parte de la Semarnat, ahora deberá demoler la estructura que construyó sin los permisos ambientales requeridos.
Dreams Tulum tampoco estrenará jacuzzi
En la misma solicitud de regularización, el representante legal de Dreams Tulum también solicitó a la Semarnat la autorización para construir un jacuzzi, que se ubicaría junto a la alberca; el promovente justifica su necesidad en virtud de “la demanda por parte de los huéspedes del servicio de jacuzzi para su relajación, por lo que, considerando el arreglo de los componentes del hotel, el sitio apropiado para el jacuzzi se encuentra a un costado de la piscina”.
La inversión requerida para el jacuzzi es de 304 mil 265 pesos, y su superficie de construcción es de 19.63 metros cuadrados, aunque esta obra tampoco podrá realizarse, pues fue rechazada por la Semarnat.
El hotel Dreams Tulum (Solé Resort) fue clausurado, parcialmente, el 26 de septiembre del 2008, y en su momento, Raziel Villegas Núñez, director de Impacto Ambiental y Zona Federal Marítimo Terrestre de la Profepa, calificó las violaciones ambientales producidas por este centro como “bastantes graves”, pues de 150 habitaciones que tenía autorizadas, construyó 443, sin contar las varias obras, como el Centro de Convenciones, que realizó sin los permisos necesarios. (Noticaribe)