PLAYA DEL CARMEN, MX.- Lo endeble del Código Penal y de Procedimientos Penales de Quintana Roo prácticamente fomentan la delincuencia, porque los cuatro peligrosos hampones venezolanos que forman parte de una banda internacional dedicada a la clonación de tarjetas bancarias ya se encuentran nuevamente en la calle haciendo de las suyas, ya que, no obstante que recibieron sentencia condenatoria del Juez Primero de lo Penal, al ser de tres años, la máxima que sanciona este delito, pudieron conmutar la cárcel mediante un irrisorio pago.
Alrededor de las 16:30 horas del lunes, los delincuentes internacionales Miguel Angel Alcántara Rivas; Giovanni Nicolás Galassi Rivas, Marco Antonio Sánchez Blanco, los antes mencionados de 27 años de edad, y Luis Rodríguez Piñazo de 35 años, abandonaron la cárcel municipal, ubicada en terrenos del ejido Playa del Carmen, porque conmutaron la prisión mediante un irrisorio pagó de aproximadamente 12 mil pesos por cada uno. Lo anterior está previsto en el Código Penal y de Procedimientos Penales.
Aunque se agregó el Artículo 189 Bis en el Código Penal y que tipifica como delito grave la clonación de tarjetas bancarias, por lo que el delincuente que reciba el auto de formal prisión no tiene derecho al beneficio de la libertad bajo fianza, la sentencia prevista en el artículo 189 no fue modificada: Se impondrá prisión de seis meses a tres años y de quince a noventa días multa, al que para obtener un beneficio o para causar un daño, falsifique o altere documento público o privado.
Como se recordará la madrugada del martes 9 de febrero del año 2010, los integrantes de la banda internacional de clonadores de tarjetas fueron detenidos por la Policía Municipal Preventiva (PMP), con 37 tarjetas de debito apócrifas, 36 de HSBC, y una de Banca Afirme, así como 142 mil 750 pesos que recién habían retirado de los cajeros automáticos con los plásticos clonados, cuando viajaban en una lujosa camioneta Hummer.
La mañana del mismo martes 9 de febrero, los venezolanos fueron puestos por la PMP a disposición de la agencia investigadora del Ministerio Público del Fuero (MPFC) por los delitos de falsificación y uso de documentos falsos, así como por ultrajes a la autoridad. La noche del miércoles 10 de febrero, el Ministerio Público resolvió la situación jurídica de los venezolanos, con su consignación al Juzgado Primero de lo Penal.
La madrugada del miércoles 17 de febrero, el Juez Primero de lo Penal, resolvió la situación jurídica de los delincuentes venezolanos, con el auto de formal de prisión por los delitos de falsificación y uso de documentos falsos, por ultrajes a la autoridad recibieron el auto de formal libertad; sin embargo, la clonación de tarjetas por ser delito grave, enfrentaron proceso en prisión, hasta que la propia Ley permitió que recuperaran su libertad la tarde del lunes. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)