CANCÚN, MX.- Arrendadoras de autos y ciudadanía “no encuentran esquina”, con los asaltos que realizan elementos de tránsito y de todas las corporaciones policiacas en el destino a unos días de que cambie la administración.
CANCÚN, MX.- La corrupción que prevalece al interior de Tránsito municipal es tal, que aun cuando los ciudadanos no paguen la ya tradicional “mordida”, los mandos de la corporación tienen garantizada la “cuota” diaria, pues cuentan con el área de infracciones en donde el dinero que ingresa con los descuentos del 50 por ciento, no llegan a las arcas municipales.
Todo está perfectamente bien armado, pues desde el director de Tránsito Carlos Arias González hasta personal del ayuntamiento, reciben una parte de este dinero, que en teoría debería ser usado para mejoras de la ciudad.
Los operativos de Tránsito encabezados por el director de la corporación Carlos Arias González, no son los únicos medios utilizados para extorsionar a los ciudadanos.
Y es que al interior, todo está estructurado de manera tal, que los beneficiados siempre terminan siendo unos cuantos.
El área de infracciones se ha convertido en una más de las “proveedoras” de ingreso para el director de Tránsito y para personal del ayuntamiento que solapa dichas actividades.
Las infracciones que son impuestas por los oficiales de Tránsito en las calles, pueden obtener descuentos hasta de más de un 50%, pero el dinero pagado por los ciudadanos no entra a las arcas municipales, pues estas infracciones con descuento no se pagan en caja, sino al personal encargado del departamento de infracciones.
El personal manipula el sistema de infracciones para embolsarse una gran cantidad de dinero, con el consentimiento del director de Tránsito, Carlos Arias González.
Con esto, no sólo se extorsiona a los cancunenses sino que además se estafa al ayuntamiento de Benito Juárez.
Gracias a que el sistema de cómputo en el área de infracciones es prácticamente obsoleto, este es manipulado y así se evita que se descubran los malos manejos en caso de una auditoría.
Los operativos de Tránsito como el alcoholímetro y radar son sólo el inicio del círculo de corrupción que existe en la Dirección de Tránsito, de la mano del área de infracciones.
La forma de operar en el área de infracciones es simple, se simula conseguir descuentos, se simula también hacer los trámites ante atención ciudadana y así se engaña al ciudadano haciéndole creer que se le está haciendo “un favor” u ofreciendo “una gran ayuda”.
Al hacer el trámite de supuesta ayuda con el ciudadano, este dinero no es reportado al municipio y ni siquiera se le entrega un comprobante o recibo a quien paga la multa.
Dentro del grupo de elementos que forman parte del departamento de infracciones y encargadas de manipular el sistema, además de abordar a los ciudadanos que van a efectuar el pago de su infracción a las instalaciones de Seguridad Pública, se encuentran Marisol Santos Díaz, Miguel Basáñez Cañedo, Laura Gutiérrez Suárez, Ana Karen De La Cruz Pérez, Carlos Girón Fernández, Edith Fagoaga Lavalle, “La china” y el delegado de taxistas conocido como “Chente”.
Los mismos elementos de Tránsito señalan que personal que labora en el ayuntamiento también reciben su “tajada”.
Todo está cubierto y si los elementos que son enviados a las calles a patrullar para cubrir la cuota no la consiguen, al momento de pagar su infracción, se recupera el dinero no obtenido de la extorsión en las calles. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
Julio Góngora, expresidente de la Asociación de Arrendadores de Autos en Cancún, señaló que desde hace meses han dejado sueltos a los elementos de tránsito y no hay nadie que los pueda parar, lo que representa para las arrendadoras y para toda la ciudadanía un golpe económico muy fuerte.
Esta situación también la reporta la ciudadanía que se dice acosada por elementos de tránsito local y hasta de fuerzas federales que se encuentran en el destino y que con cualquier pretexto te detienen y hay algunas denuncias de que amenazan con multar cuando ni siquiera tienen facultad para ello.
Para el prestador del servicio turístico de arrendamiento y el acosamiento de elementos de tránsito, el golpe ha sido duro en las últimas semanas, porque inhibe la renta de vehículos en el destino, ya que el turismo tiene miedo de ser detenido por estos elementos que se esconden y aprovechan cualquier pretexto para obtener un dinero.
Las “multasmordidas” para la ciudadanía van de los 150 pesos para arriba, un monto menor es una ofensa para el elemento, pero en el caso del turismo que es detenido, las estafas van de los 100 hasta casos con 500 dólares que indignan al viajero que prefiere regresar el auto.
Se han dado casos en que un coche rentado no tiene ni dos horas de ser entregado cuando se devuelve porque el usuario fue detenido hasta en dos ocasiones sin ningún pretexto, lo que merma los ingresos del sector gravemente.
Esto se registra por lo menos una vez a la semana donde se rentan de 30 a 40 vehículos y por lo general cuando el turista retorna el coche casi siempre refiere algún incidente con algún elemento de Tránsito, sea turístico, policía preventiva o lo que sea.
No es posible, refirió, que la queja sea recurrente y que la autoridad no haya podido tomar medidas para controlar esta situación que sin duda demerita la propia imagen del destino y la calidad del servicio que se ofrece.
Sobre el tarjetón turístico que se implementó hace unos años para evitar este tipo de actos delictivos que cometen los elementos de Tránsito, señaló que este acuerdoes “letra muerta” y se dejó perder el acuerdo alcanzado, por lo que el turismo quedó en manos de los malos elementos que aprovechan cualquier situación (ahora la salida de la administración) para cometer sus fechorías a plena luz del día y sin temor a nada.
Otros arrendatarios que también se han visto afectados señalaron que es urgente que la autoridad tome cartas en el asunto y retire a todos sus elementos de tránsito de las esquinas, porque sólo se esconden para morder.
Aunque no se tiene un monto de las multas que se generan en el destino cada semana, si se estima que las mordidas que nunca entran a las arcas, son cinco veces mayor que una multa oficial.
Son los trabajadores de los negocios, dijeron, los que tienen que dar la cara con el turismo por esta situación de abuso que se presenta, lo que es sumamente desgastante para todos, pues al final, la mancha a la calidad turística está hecha y no hay quien pare este descontrol.
Consideraron que para los próximos días, esta situación se estará agravando por lo que informaron que le hacen recomendaciones puntuales al turismo para que no exceda velocidad y no cometa alguna infracción, aunque sea menor, ya que cualquier cosa será aprovechada por esos delincuentes con placa oficial. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)