CANCÚN, MX.- Dos “levantones” fueron reportados este martes a las autoridades en diferentes puntos de la ciudad. En uno de los casos, la víctima de 17 años de edad, logró escapar de una casa de seguridad y pedir ayuda a la Policía Judicial del Estado (PJE).
A las 5:00 horas de este martes, se recibió el reporte de un “levantón” en la Región 201, manzana 90, en el cruce de las calles Ixtepec y Niños Héroes.
De acuerdo con el reporte recibido, siete sujetos armados con armas largas, bajaron de una camioneta tipo Hummer color negro y una camioneta tipo Lobo del mismo color, y se llevaron a un sujeto del que hasta ayer se desconocía la identidad.
Elementos de Seguridad Pública y de la Policía Judicial del Estado (PJE), hicieron un operativo de búsqueda por la zona, pero no localizaron las dos camionetas que fueron señaladas en el reporte.
Más tarde, alrededor de la una de la tarde, se recibió el reporte de otra privación ilegal de la libertad en la Región 93, manzana 97, en un domicilio marcado con el número dos.
Elementos del grupo de Fuerza de Reacción y Apoyo Inmediato (FRAI), así como elementos del grupo de diversos, se trasladaron hasta la dirección señalada, y ya iban acompañados de la víctima.
Se trata de un joven de 17 años de edad, que logró escapar de sujetos que lo mantenían encerrado en el domicilio señalado y en un descuido salió corriendo para pedir ayuda en la agencia del ministerio público de la Región 94.
Brevemente, el joven agraviado narró parte de lo sucedido y comentó: “Me tenían amenazado que me iban a matar si no traían los dos mil pesos en media hora, pero ya como pasó la media hora, según les llamaron a ellos y les dijeron que ya me mataran y ya cuando mi mamá llamó y dijo que iba a meter una demanda ellos me dijeron que ya no iba a salir vivo de ahí, que iba a quedar como los demás que estaban ahí. Me empezaron a pegar, desde que llegué me estaban pegando con el machete. Yo vine a ver a mi amigo, se suponía que era mi amigo pero ya después se volteó la cosa”.
El joven dijo que un amigo de nombre Erbey, lo invitó a tomar unas cervezas en ese domicilio pero una vez estando ahí, lo encerraron y no lo dejaban salir.
Agregó que sus captores llamaron a sus padres exigiéndoles cinco mil pesos, pero después bajaron la cantidad a dos mil.
Al ver que la familia del joven ya no respondía las llamadas desde su celular, lo sacaron de la casa para que hablara desde un teléfono público que hay enfrente y fue entonces cuando salió corriendo escapando de ellos, hasta que llegó a la agencia del ministerio público de la Región 94 en donde pidió ayuda.
Dijo que dentro de la casa, había otras personas privadas de su libertad, pero cuando agentes del ministerio público llegaron al domicilio no encontraron a nadie en su interior.
El joven fue trasladado ante el ministerio público para que rindiera su declaración. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)