CANCÚN, MX.- La petición de querer que la marca Caribe Mexicano deje de estar enganchada a la de México no es un acto de antinacionalismo, sino de visión de marketing, pero el tema es tomado por populistas y desvirtuado, por ello, aunque Cancún no sufra del tema de inseguridad y haga lo posible por dar el mejor servicio, vive los efectos negativos de esa mala percepción que hay del país, aseguró Francisco Córdoba Lira, presidente del Consejo Coordinador Empresarial de Cancún.
Mencionó que las afectaciones sobre el tema de inseguridad en Cancún no son tan severas como en otros destinos, argumentando que las cifras económicas del primer cuatrimestre del año son similares a las del año anterior, ello derivado de que muchos servicios y productos han hecho un buen trabajo de mercadotecnia.
“Esto nos deja un mensaje muy claro, que los productos y servicios en Quintana Roo que han hecho una buena labor de promoción están por arriba de lo esperado para este año (…) pero no hay ninguna duda de que las señales que se envían a través de los medios de comunicación, de las mismas entrevistas que le hacen a nuestro presidente en el extranjero, manifiestan que tenemos un país con problemas de inseguridad y el turismo no se puede desarrollar así”, acotó.
Ante ese panorama, el presidente de la CCE en Cancún recordó que son varias las ocasiones en que han intentado ante la Secretaría de Turismo federal (Sectur) y el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) la conveniencia de separar la marca Caribe Mexicano, pero que siempre ha sido mal tomada dicha propuesta.
“Hemos insistido hasta el cansancio que amamos y respetamos mucho nuestro país, pero que para términos de mercadotecnia como la marca Cancún, más bien Caribe Mexicano, está tan bien posicionada que nos conviene separarla, pero siempre estas frases se confunden, por gente populista; no es justo que no nos podamos separar y protegerla”, acotó.
Por último, dijo que la marca Caribe Mexicano produce prestigio, dinero, impuestos y empleos y que la gente confunda el mensaje de que sólo desean luchar por ella seguirá condenando a Cancún y a Riviera Maya a sufrir bajas de flujo turístico por efecto de la percepción que hay de México.
“Porque no se puede promover una marca que está unida a otra marca si una de ellas está con mal posicionamiento”, concluyó. (Fuente: SIPSE/Novedades de Quintana Roo)
