CHETUMAL, MX.- La suspensión del servicio a la unidad deportiva del Instituto Tecnológico de Chetumal, se debió no sólo por el adeudo de 400 mil pesos, sino porque se estaba robando la energía eléctrica, reconoció el superintendente de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Jorge García Castillo, quien explicó que no se denunciará penalmente este delito ante el alto costo que provocaría un juicio y sólo tratarán de recuperar el dinero del consumo que por dos años hizo esa institución académica.
Pese a ello, autoridades del plantel se niegan a pagar esa cantidad y piden un “descuento”.
El funcionario federal reconoció que tras una remodelación de la unidad deportiva, la empresa encargada de esos trabajos instaló también un transformador, pero de tal manera que no marcaba el consumo y fue hasta que la CFE hizo una revisión cuando se dieron cuenta de este problema y que según el entrevistado tenía como dos años de estar funcionando así.
Se les notificó a las autoridades del plantel y de acuerdo a la fecha de remodelación, se calculó un total de dos años y sobre el consumo normal del instituto se les propuso un pago de 400 mil pesos, pero las autoridades escolares “no están de acuerdo” y quieren pagar menos, aunque robarse la luz es un delito.
Al respecto, García Castillo reconoce que lo ocurrido en este plantel es un delito, sin embargo no demandaron penalmente debido a la complicación de esos juicios. “En términos estrictos se puede tipificar como un delito, pero normalmente nosotros no interponemos denuncia penal porque lo que buscamos es la recuperación del cobro de la energía dejada de facturar”.
Dijo que “desgraciadamente es un problema porque tendríamos que contar con un aparato jurídico bastante amplio para atender todas y cada una de esas denuncias, entonces nosotros valoramos o recuperamos el dinero o metemos a la cárcel a los responsables y aquí se opta por la recuperación de lo que no se pagó”.
La unidad seguirá sin energía eléctrica, lo que afectará a los deportistas que acuden a ese lugar y que desde hace dos semanas no pueden entrenar. (Fuente: SIPSE/Novedades de Quintana Roo)
