TULUM, MX.- Intensa movilización policíaca generó el aviso de que un grupo de sicarios había “levantado” a un joven en las inmediaciones de la Unidad Deportiva de Tulum, quien finalmente apareció en un predio de la zona costera, amarrado y listo para ser quemado vivo por un grupo de cuatro individuos.
TULUM, MX.- Tres presuntos integrantes de la banda de “Los Pelones” fueron detenidos tras el rescate de un sujeto al que pretendían ejecutar en la zona costera de esta ciudad.
De acuerdo con datos proporcionados por la corporación policiaca, alrededor de las 17:30 horas recibieron un reporte de que a la altura del hotel “Las Ranitas”, ubicado en el kilómetro 7+500 de la vía Tulum-Boca Paila, en la zona costera, habían escuchado gritos de una persona, situación que había alterado a los turistas.
Elementos de la Policía Municipal Preventiva iniciaron un operativo en el lugar de los hechos y encontraron a un sujeto atado de pies y manos quien dijo llamarse Oseas Hernández Chan, de 18 años, el cual presuntamente iba a ser ejecutado, ya que a su costado encontraron botes de gasolina y petróleo, al parecer porque tenía cuentas pendientes con un grupo delictivo.
Hernández Chan reveló que horas antes había sido “levantado” cerca de la Unidad Deportiva por cuatro sujetos, entre ellos uno apodado “El Queque”, los cuales circulaban a bordo de un vehículo marca Chrysler, tipo Spirit, color negro, con placas YZX-35-30 del Estado de Yucatán.
En ese momento la corporación giró instrucciones para iniciar la búsqueda de la unidad.
Luego de treinta minutos los agentes detuvieron la unidad y aseguraron a Joaquín Eusebio Ara Poot, de 25 años de edad y originario de Chetumal, y a Manuel Gutiérrez Ovando, de 17 años, oriundo de Playa del Carmen, quienes dieron a conocer datos de un tercer implicado en el centro nocturno “Gian Carlos Bar”, del boulevard Tulum.
En dicho lugar los elementos de la Policía Federal detuvieron a un sujeto, cuyo nombre no fue dado a conocer, y aseguraron varias dosis de cocaína listas para ser comercializadas, aunque no se precisó la cantidad.
La unidad y los tres sujetos detenidos fueron enviados al Ministerio Público Federal de la Procuraduría General de la República, en la ciudad de Cancún, en donde presentarán su declaración. (Fuente: Diario de Quintana Roo)
De acuerdo con la Policía Municipal de Tulum, alrededor de las 17:35 horas de este viernes, recibieron un aviso de que en un terreno bardeado de la carretera Tulum-Boca, a la altura del kilómetro 7+500, frente al hotel “Las Ranitas”, se escuchaban los gritos de una persona que pedía auxilio porque lo querían matar.
Ante esta situación, el titular de la corporación, Juan Carlos Santana Robelo, organizó un operativo para ubicar el sitio donde se encontraba la persona que pedía auxilio. Al arribar al predio, los policías se encontraron con un joven de 18 años de años, quien dijo llamarse Oseas Hernández Chan, alias “El Taco”, atado de pies y manos, diciéndoles que un grupo de cuatro personas que minutos antes se habían dado a la fuga lo “levantaron” y tenían intenciones de quemarlo vivo.
Sin embargo, al alertarlos que había un operativo por la zona, abandonaron al plagiado y se escaparon en dos vehículos con rumbo al centro de la ciudad, pero con los datos que proporcionó el secuestrado se implementó un operativo para ubicar a una camioneta blanca sin placas y un automóvil Chrysler Spirit, color negro.
Ante esta situación, los agentes policíacos y de Tránsito se dieron a la tarea de rastrear a los vehículos que mencionó Hernández Chan, ubicando a uno a la altura del Boulevar Tulum con el crucero hacia Cobá, en donde detuvieron a sus ocupantes, quienes señalaron que correspondían a los nombres de Joaquín Eusebio Ara Poot, de 26 años de edad, originario de Chetumal, quien manejaba el auto Chrysler Spirit, placas de circulación YXZ-35-30 del Estado de Yucatán, mismo que reconoció pertenecer a una célula de “Los Pelones”, además presentaba diversos tatuajes en diversas partes del cuerpo alusivas a la muerte.
De igual manera, aseguraron a Manuel Gutiérrez Ovando, de 17 años de edad, quien aceptó que en compañía de otras personas habían “levantado” a “El Taco” y entre sus planes se encontraba quemarlo vivo, ya que al parecer tenía cuentas pendientes con la organización criminal.
Los dos asegurados informaron que el resto del grupo de los sicarios se había dirigido al centro nocturno “Giancarlo” en donde realizaban sus operaciones ilícitas, ante lo cual el director de la corporación policíaca decidió solicitar el apoyo de la Policía Federal, quienes arribaron a Tulum alrededor de las 21:300 horas para implementar el operativo en donde revisaron a los asistentes y aseguraron a otro individuo, mismo que fue enviado directamente a Cancún, sin reportar su nombre.
En el sitio, los federales encontraron media docena de grapas de cocaína y centenares de bolsitas listas para colocar el enervante para su comercialización en el mercado tulumense, además de otros implementos que se utilizan para el pesaje y envasado de las drogas.
Por su parte, Juan Carlos Santa Robelo, titular de la corporación policíaca en el municipio, explicó que el joven “levantado” fue enviado para que recibiera atención médica en el Centro de Salud de Tulum y posteriormente, enviado a Cancún en una ambulancia de la Cruz Roja Mexicana, fuertemente custodiada para evitar que pudiera sufrir otra agresión en el camino.
Indicó que en el terreno donde lo encontraron amarrado había dos bidones con gasolina y petróleo, los cuales iban a ser utilizados por los sicarios de “Los Pelones” para quemarlo vivo, una vez lo hayan obligado a brindar información sobre otros presuntos distribuidores que trabajan de manera independiente, a quienes se les conoce como “Chapulines”.
Alrededor de las 23:15 horas, los dos detenidos y el “levantado” fueron trasladados a la ciudad de Cancún, en donde serán presentados durante el transcurso de la mañana del sábado, ya que los tres detenidos aportaron datos importantes sobre la presencia de una célula de “Los Pelones” en el municipio, quienes distribuyen drogas en los negocios del Boulevard Tulum y calles aledañas, y en los hoteles de la zona costera. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)