PLAYA DEL CARMEN, MX.- El pavimento mojado y el exceso de velocidad cobraron una vida más en la denominada “carretera de la muerte”, cuando un desafortunado individuo circulaba la tarde de hoy a bordo de un vehículo compacto en el tramo Puerto Morelos-Playa del Carmen, y kilómetros antes del filtro 1 perdió el control de la unidad y se estrelló primeramente con la llanta de una retroexcavadora y luego con una grúa plana.
Peritos en criminalística levantaron el cuerpo, mientras que otra persona fue trasladada a un hospital donde su estado de salud fue reportado como grave.
Los hechos ocurrieron a las 15:00 horas de hoy, cuando Carlos Miguel Lizama Chuc, de 35 años de edad, manejaba con exceso de velocidad el vehículo marca Nissan, tipo Sentra, color gris, con placas 296-NA, de Norte a Sur, en la carretera federal en mención.
Sin embargo, dos kilómetros antes de llegar al denominado filtro 1, una mala maniobra hizo que con el pavimento mojado las llantas derraparan, para primeramente estrellarse con una retroexcavadora estacionada y después impactó la parte trasera de una grúa plana que estaba a un costado de la vía, terminando a media carretera completamente destrozada la unidad.
Al lugar de los hechos arribaron paramédicos de distintas ambulancias, además de personal de bomberos de Playa del Carmen, quienes con la denominada quijada de la vida rompieron lo que quedaba de la unidad y sacaron de los fierros retorcidos al acompañante del vehículo, quien fue trasladado de emergencia a un hospital.
En tanto que minutos después arribaron peritos en criminalística, agentes judiciales y del Ministerio Público, quienes dieron fe de los hechos y trasladaron el cadáver de quien se desempeñara como jefe de Servicios Generales del Ayuntamiento de Solidaridad, mismo que quedó prensado con el volante, muriendo al instante del impacto, el cual fue trasladado al Servicio Médico Forense para la necropsia de Ley.
Por último, agentes de la Policía Federal Preventiva levantaron las unidades involucradas en el percance y fueron trasladados al corralón. (Fuente: Diario de Quintana Roo)