CANCÚN, MX.- A Pedro Segovia Hernández lo “pusieron”. Víctima de sus actos, el elemento del turno B del sector 10 de la Secretaría de Seguridad Pública, fue denunciado por propios policías municipales con la banda delictiva de “Los Pelones”, de no cubrir la narconómina.


Asimismo, de acuerdo a la tarjeta informativa elaborada por la policía municipal, la lista de elementos que tenía entre sus pertenencias Segovia Hernández antes de ser asesinado, era parte del “personal policiaco” reclutado por “Los Pelones” y adscritos al sector 10.
La lista, no pudo ser retirada del lugar de los hechos, a pesar de que se sospechaba que el oficial de turno B contaba con esa información para “intentar” ganar tiempo y recuperar toda la narconómina que no repartió en la primera quincena de septiembre.
De hecho, desde el pasado 2 de septiembre, la vida de Pedro Segovia estaba condenada, ya que presuntamente no era la primera vez que manejaba de “mala manera” los recursos del crimen organizado.
Y ante eso sus horas estaban contadas. Fueron sus propios compañeros policías, vinculados directamente con el grupo delictivo de “Los Pelones” quienes decidieron ponerle un “cuatro” la mañana del 5 de septiembre.
Las primeras investigaciones sostienen que el policía del turno B del sector 10 recibió una llamada y fue citado en el estacionamiento de la Multiplaza, donde recibiría dinero.
Sin pensarlo, y ante la deuda que tenía, Segovia Hernández acudió a la cita donde instantes después sería interceptado y ultimado con 18 tiros, todos ellos certeros y con mucha saña.
En teoría, su muerte significaría un mensaje para todos aquellos que “juegan” con la delincuencia organizada en Cancún, sin embargo, para muchos policías también desató una nueva investigación en contra de la Secretaría de Seguridad Pública.
Lo anterior se debe a que el policía asesinado tenía en su poder una lista con nombres de elementos adscritos al sector 10 que cobraban con “Los Pelones”, un sueldo por protección y venta de información bajo el sistema de “Halcones”.
Esta situación significa que una vez más, quedó al descubierto la red de complicidades al interior de la policía municipal de Cancún, pese que las autoridades municipales han intentado minimizar los hechos.
Para evitar que policías quedaron expuestos, varios elementos policiacos intentaron en dos ocasiones limpiar la escena del crimen de Segovia Hernández, sin embargo, no pudieron encontrar la lista que tomó el perito de la Procuraduría de Justicia.
La lista se encontraba al interior del compartimiento de carga de la motocicleta tipo Scooter del comandante de turno.
Otro dato que resalta en los hechos fue que el primero en reconocer el cadáver de Pedro Segovia, fue el jefe del sector 10 de la Secretaría de Seguridad Pública, Clemente González Torres.
González Torres fue el tercer mando medio de la corporación en llegar al lugar donde había ocurrido el asesinato.
Asimismo, cuando el auto tipo Jetta color gris con placas de circulación YZK5330 fue incendiado, 25 patrullas de Seguridad Pública recorrieron el lugar para evitar que la obra fuera interrumpida.
Ante esto, la investigación continúa y todos los hechos han sido ya incluidos en el informe que maneja la Procuraduría de Justicia con respecto a la ejecución de Pedro Segovia Hernández. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

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