Si Eduardo Espinoza Abuxaqpqui es su mejor carta, la clase política chetumaleña está en serios problemas para alcanzar a los cozumeleños, que dominan la escena priísta en la entidad.
Hasta ahora, Eduardo había pretendido “venderse” como una especie de disidencia frente a los cozumeleños, que también tienen el control de facto del Congreso del estado, con Fredy Marrufo.
Pero, Eduardo se portó como leal empleado de Fredy Marrufo, en el tema de reestructuración de la deuda estatal.
Apenas días antes, había hecho tremendo papelón, al promover que los diputados también tengan “guaruras”.
Lo anterior, sin pasar en alto, sus contradicciones en relación a Bibiano Villa Castillo, al que, por línea, primero defendió, y luego, pidió su salida.
Aunque de este estilo de sumisión, también hizo gala cuando fue diputado federal al asumir, por instrucciones del entonces Gobernador Félix González, la contrarreforma a la Ley de Vida Silvestre
Por eso los cozumeleños se están apoderando de Chetumal.