CANCÚN, MX.- A lo largo de este año y hasta el mes de septiembre, se tiene registro de manera oficial de nueve secuestros cometidos por el crimen organizado, en tanto que muchos otros no fueron denunciados.
Sólo en tres de estos casos, se logró la detención de parte de las bandas criminales que cometieron los secuestros.
Los grupos delictivos han establecido distintas modalidades en el secuestro, pues en muchos casos, se realizan los llamados “secuestros Express”, en donde las víctimas son privadas de su libertad por corto tiempo, generalmente para robarles sus vehículos.
Otras víctimas lamentablemente, han sido ejecutadas después de que los criminales obtienen sus vehículos, mismos que utilizan para cometer otros delitos.
Desde principios de este año, los secuestros continuaron siendo un tema de preocupación para las autoridades y sobre todo, para la ciudadanía en general.
Y es que desde el año pasado, el crimen organizado vio en el secuestro una forma rápida de obtener jugosas ganancias, al privar de su libertad a empresarios y comerciantes, pidiendo por ellos sumas millonarias a cambio de dejarlos en libertad.
Muchos han sido los casos que no son denunciados y que no salen a la luz pública.
La Procuraduría de Justicia del Estado tiene registro de manera oficial, de nueve secuestros que fueron denunciados de enero al mes de septiembre.
En enero, se denunció un secuestro, en marzo fue denunciado otro, en mayo y en junio se denunció un hecho de este tipo en cada mes; en tanto que en agosto fueron tres los secuestros denunciados y dos más en el mes de septiembre.
Tipos de secuestros
-Organizado y/o dirigido. Se realiza por grupos formados por tres o más individuos que tienen una estructura organizacional bien definida y que cuentan con los recursos necesarios; seleccionan y estudian a su víctima, estableciendo los apoyos o logística para cometer su acto criminal.
-Ocasional o no dirigido. Grupos criminales más o menos organizados que escogen a su víctima al azar pueden o no tener recursos suficientes y sólo buscan un beneficio económico.
En este tipo de secuestros se incluyen el secuestro Express, en donde el modus operandi de los grupos delictivos es escoger a las víctimas al azar, las cuales por lo general se encuentran transitando por la vía pública o salen de una institución bancaria y son interceptados por dos o más sujetos que retienen a sus víctimas por horas o unos cuantos días, durante los cuales exigen cierta cantidad de dinero o los llevan a los cajeros automáticos a sacar la mayor cantidad de dinero que se pueda, les quitan el vehículo que llevan o, en su caso, hablan a su domicilio y piden un rescate.
En esta subdivisión también se incluye el secuestro virtual, en donde los delincuentes engañan a las víctimas vía telefónica, diciéndoles que se tiene un familiar secuestrado, sin que esto se haya efectuado, afirmando a los familiares que si en una hora no entregan cierta cantidad le harán daño al familiar.
En Cancún, este tipo de llamadas son tomadas como extorsiones y en muchas ocasiones, las víctimas han caído en el engaño depositando cantidades de dinero en cuentas bancarias.
Secuestros 2011
El primero del que se tiene registro, fue el del empresario de origen italiano Benedetto Stassi, quien fue secuestrado el 11 de febrero junto con su trabajador Marco Antonio Díaz Alamilla.
Aunque la policía inició esta investigación, a unas cuantas horas de haber sido privado de su libertad, el empresario italiano regresó a su casa, pero después se negaría a rendir su declaración ante el ministerio público sin que se supiera si habían pagado algún rescate por él.
El 19 de julio, Pablo Quiroga Provencio gerente del taller “Pro Service” ubicado en la avenida Xel-Há, en la Supermanzana 28, manzana 10, lote uno; fue secuestrado a plena luz del día por un comando armado.
El gerente del taller se encontraba parado en la entrada principal para entregar un vehículo a un cliente, cuando en ese momento se estacionó una camioneta Voyager color verde, en la que viajaban cinco sujetos armados.
Dos de ellos descendieron de la unidad portando armas de grueso calibre y se dirigieron hacia Quiroga Provencio a quien abrazaron para después subirlo por la fuerza a la camioneta.
El mismo martes por la noche, la esposa de Quiroga Provencio L. D. Z. R., acudió ante el Ministerio Público del Fuero Común para denunciar la desaparición de su esposo.
Después de un millonario rescate, Quiroga Provencio fue dejado en libertad dos días después de haber sido secuestrado.
Finalmente, el 28 de octubre el empresario Leopoldo Giovanni González Larriva, fue secuestrado junto con su novia Talía Viadas Rojas, su entrenador personal Alejandro Palafox y un trabajador que sólo fue identificado como “Fili”.
Hasta ahora, las autoridades no han investigado sobre el caso y tampoco se ha establecido la suma que los secuestradores pidieron para dejarlos en libertad, aunque se habla de que fueron cinco millones los que se pagaron para que las cuatro personas fueran dejadas en libertad.
Secuestros Express
En los últimos meses, los grupos delictivos comenzaron a llevar a cabo secuestros Express, para obtener recursos económicos de manera inmediata sobre todo vehículos.
De los que se tiene registro, en el mes de agosto el empresario Alejandro Miravete Ruiz fue secuestrado cuando iba a bordo de su vehículo Jetta color gris Oxford, el cual fue usado después para ejecutar al policía Pedro Segovia Hernández. Para ello, fue pintado de un color más claro y le colocaron otras placas. Después de la ejecución y para no dejar huellas, el vehículo fue incendiado por los mismos sicarios.
El empresario fue ejecutado horas después y su cuerpo fue encontrado apenas el pasado viernes, después de la detención de dos integrantes del grupo de “Los Pelones”, quienes guiaron a la policía hasta donde se encontraba el cuerpo en la autopista Cancún-Mérida.
Lo mismo ocurrió con la joven Concepción Guillén Alfonso, quien fue secuestrada cuando conducía un vehículo tipo Jetta modelo 2000 color negro, con placas de circulación 201-RUA del Distrito Federal y posteriormente, fue ejecutada después de que integrantes del grupo delictivo de “Los Pelones”, abusaran sexualmente de ella.
Su cuerpo fue encontrado en un área verde a un costado de la autopista Cancún-Mérida.
Otro caso similar, fue el de la camioneta Captiva color vino, con placas de circulación USS-6442 del estado de Quintana Roo, la cual fue abandonada en la Región 225 en el mes de septiembre cuando se desató una balacera entre policías municipales y un grupo de sicarios de “Los Pelones”.
Dicha camioneta, fue obtenida mediante un “secuestro Express” cometido dos días antes, cuando dos jóvenes que iban a bordo de ella fueron interceptados cuando se encontraban en la avenida Las Torres, cerca de una tienda de conveniencia Oxxo.
Fuertemente armados, los delincuentes sometieron a los jóvenes y los obligaron a entregarles la camioneta y después, los abandonaron.
Una vez robada, las placas de la camioneta fueron cambiadas y dos días después, fue usada en la balacera.
La camioneta Grand Cherokee Laredo color gris plata que fue encontrada en la Región 234 al otro día de la misma balacera, también era un vehículo robado.
Según información obtenida, esta camioneta fue robada en Chetumal pero el propietario no interpuso una denuncia por el robo y las placas ZAG-1548 del estado de Yucatán, eran sobrepuestas.
Casos resueltos
De todos los secuestros de los que se tiene registro este año, sólo en tres casos ha habido personas detenidas, aunque algunas de manera circunstancial.
Uno de estos casos, fue el de la socia del sindicato de taxistas “Andrés Quintana Roo” Dora Aidé Trujillo Cruz, quien fue secuestrada por un comando armado cuando se encontraba en un taller mecánico de la Supermanzana 64 el cuatro de marzo.
La familia de la socia taxista pidió a la policía que no interviniera y fueron ellos los que negociaron con los secuestradores que resultaron ser integrantes del grupo delictivo de “Los Zetas”.
La cifra por el rescate de la mujer, fue de 10 millones de pesos, de la que sólo se pagaron 420 mil pesos en efectivo y las escrituras de un terreno valuado en dos millones de pesos.
Dora Aidé Trujillo Cruz fue rescatada sana y salva 20 días después, por elementos del Ejército, en una casa de seguridad de la Supermanzana 503 y ahí fueron detenido Ramses Arreola Sánchez (a) “Ramses”, José Salvador Reynaga Zúñiga (a) “El Gordo”, Luis Enrique Paz Sosa (a) “El Max” y Víctor Emanuel Delgado Medrano (a) “El Chumil”; todos integrantes del grupo de “Los Zetas”, actualmente recluidos en la cárcel.
En el caso del empresario Alejandro Miravete Ruiz y la joven Concepción Guillén Alfonso, han sido detenidos varios integrantes del grupo delictivo de “Los Pelones”.
Los primeros fueron Peter Figueroa Sánchez, Juan Antonio Garibay Morales (a) “El Jhonny” y Edgar David Ojeda Arias, quienes confesaron haber participado en ambos secuestros, además de varias ejecuciones y el ataque a la agencia del ministerio público de la Región 94.
Posteriormente, en el mes de septiembre y después de un enfrentamiento con policías municipales, fueron detenidos Gerardo Iván Domínguez Miller (a) “El Vaquero”, Rodolfo Dantori Caraveo (a) “Picachu” y Fermi Paul Catzín Aguilar (a) “El Gato”; quienes confesaron haber participado en los secuestros de Miravete Ruiz y la joven Guillén Alfonso.
Después serían detenidos a finales del mes de octubre Miguel Angel Sánchez Araujo (a) “El Tangas” su esposa Beatriz Donají Curbelo y Adeimi Solís Martínez; también integrantes del grupo de “Los Pelones”; quienes también participaron en los secuestros y finalmente; el pasado viernes fueron detenidos Felipe Castillo Olivera (a) “El Piolín” y Eliseo Peña Vera (a) “El Cochiloco”, integrantes del mismo grupo delictivo.
Ambos confesaron haber participado también en los secuestros y “El Cochiloco” fue quien guió a la policía hasta donde estaba el cuerpo del empresario Alejandro Miravete Ruiz. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)