CHETUMAL, MX.- Advierte la Secretaría de Salud en la entidad que en esta temporada navideña podrían desencadenarse recaídas de alcoholismo, adicciones a drogas y en general altibajos emocionales.
En la temporada decembrina por lo regular se originan miedos, ansiedad, felicidad y tristeza, llevando algunas veces al suicidio. De acuerdo a la Secretaría de Salud, hasta la semana 46, contabiliza 117 suicidios y 586 intentos.
Lo anterior lo dio a conocer el titular de la SESA, Rafael Alpuche Delgado, quien indicó que en la época navideña se puede desencadenar una recaída de las personas que se recuperan del alcoholismo y la adicción a otras drogas, así como quienes han sufrido de depresión anteriormente.
“Hacer demasiado o demasiado poco y estar separado de sus seres queridos en este momento especial, puede conducir a la tristeza durante la temporada navideña. Muchas personas que están en recuperación asocian las festividades con los recuerdos de consumo y abuso, tal vez de grandes giros o cambios que dieron lugar a problemas en sus relaciones o de grandes pérdidas personales (recordamos a quienes ya no están)”, dijo.
Por lo anterior, es que las personas experimentan sentimientos de tristeza, melancolía y aflicción ligados a los recuerdos de las festividades navideñas. A diferencia de la depresión clínica, que es más grave y puede durar meses o años, esos sentimientos son temporales.
“Cualquier persona que experimente síntomas principales de depresión, tales como tristeza persistente, ansiedad, culpa o impotencia, cambios en los patrones de sueño y una reducción en la energía y la líbido, debe buscar ayuda de un profesional de salud mental”, indicó.
Ante esa situación, recomendó para las fiestas decembrinas evitar consumir cantidades excesivas de alcohol en las fiestas, estar pendiente de los cambios de ánimo en todos los miembros de la familia, sobre todo en los adultos mayores, asistir al psicólogo, siempre es buena terapia para cerrar el año y poder vislumbrar todo lo positivo y lo menos positivo, con el acompañamiento de un profesional; también indicó que algún cambio de imagen en nosotros o nuestra casa nos renueva de energía y nos permite cerrar el ciclo del año que pasa.
Por otra parte, la actual temporada decembrina también podría desencadenar en una incidencia un poco más elevada del suicidio con respecto a otros meses. Este fenómeno se relaciona con factores como el consumo en grandes cantidades del alcohol, el recrudecimiento de los duelos y el consumismo.
Actualmente, en Quintana Roo se han registrado 117 suicidios, y son los municipios de Benito Juárez y Othón P. Blanco los que presentan más casos, con 58 y 29 actos consumados, respectivamente. Aunque es Othón P. Blanco donde se han tenido más intentos de suicidio, pues hasta la semana 46 reporta 219 casos, mientras que Benito Juárez contabiliza 217 casos de intento de suicidio, seguido de Cozumel y Solidaridad, con 58 y 57 casos, respectivamente.
La Secretaria de Salud, advierte que hay que tomar la Navidad con calma, manejar el dinero con cuidado y responsabilidad, si una persona se niega a acudir a las reuniones familiares, no se le debe obligar a presentarse, aunque es recomendable no dejarla sola en casa, donde en la pantalla del televisor todo es felicidad, y la persona se deprime al verse sola.
La Navidad, asociada con la felicidad, los buenos encuentros y la convivencia, puede resultar también una época de depresión, ansiedad y tristeza, con peligro alto de suicidio, según la SESA.
Son muchas las personas que sufren de depresión durante estas fechas, las personas pueden sentirse melancólicas, apáticas, nostálgicas y con una profunda sensación de carencia o vacío.
Otra diferencia es que las personas viven la temporada navideña con mucho estrés, el agobio por el exceso de trabajo que supone esta temporada (compra de regalos, visitas, preparativos de la cena, planeación de actividades para la familia, etc.) nos impiden también disfrutar de las festividades.
En estas fechas, nuestros hábitos de sueño, alimentación y consumo de alcohol se alteran de manera considerable, pudiendo afectar nuestra salud. Lo anterior, debido a la gran cantidad de actividades sociales (posadas, reuniones familiares, visitas de amigos), mismas que modifican nuestra actividad cotidiana. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
