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Cuanta ternura en la declinación de Cuauhtémoc Ponce Gómez en favor de Alicia Ricalde en la contienda por la candidatura a la diputación “pluri” que le corresponde al panismo quintanarroense.
Es como si el América, declinara por el Barça. Bueno, en realidad no tanto.
Aunque, Cuauhtémoc y Alicia son del mismo equipo. Sería como si el San Luis se dejara ganar por al América.
En realidad, Cuauhtémoc y Alicia ni suman ni restan, si no todo lo contrario.
Pero donde si Alicia quiere sumar, es en la Comuna de Benito Juárez donde quiere hacer valer el apellido Ricalde, entre la militancia activa panista que presta su servicios en el ayuntamiento cancunense y que es fin de semana irá a las urnas azules.
La operación convencimiento está a cargo, claro, de la oficial mayor, María Eugenia Córdova.
La consiga es muy obvia: el que paga manda.
Muy sutiles.

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