CHETUMAL, MX.- Unas 547 mujeres han sido asesinadas en Quintana Roo de 2003 a 2011, y el 65 por ciento de estas muertes se concentra en Cancún. La mayor parte de tales decesos ha sido provocada por sus parejas sentimentales, afirmó el Procurador de Justicia del Estado, Gaspar Armando García Torres.


Precisó que las mujeres que han fallecido tenían un rango de edad entre los 25 y los 35 años, y en su mayor parte con menor instrucción académica, sobre todo amas de casa.
Según dijo, hay un menor porcentaje de mujeres que han sido ejecutadas por la delincuencia organizada por participar en el narcomenudeo, situación más recurrente en la zona norte donde se encuentran destinos turísticos como Cancún y Playa del Carmen, donde se concentra el 70 por ciento de la población del estado, estimada en 1.3 millones de habitantes.
Señaló que cada año se mantiene constante el número de muertes de mujeres, situación que consideró “preocupante”, ya que si bien el número de homicidios no se compara con otras entidades afectadas por la violencia, es un escenario complicado para un estado donde los homicidios eran escasos hasta la década de los 90s.
El Procurador, quien fue titular de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, dijo que algunas de estas muertes de mujeres han sido provocadas por venganza, pleito o rencilla.
Conmocionada en fecha reciente la capital del estado por la muerte de dos mujeres chetumaleñas -una de ellas de 17 años- a manos de un psicópata drogadicto que permanece en el Cereso, el Procurador dijo que este caso es una excepción en el estado.
Incluso, dijo que hay elementos que vinculan al homicida Jorge Rosales Piña con la muerte de una joven chetumaleña cuyo cadáver fue descubierto el 18 de agosto pasado, cerca del Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario (CBTA) número 11, a la entrada de la capital del estado.
La joven de 25 años, Liliana Estreyci Rincón Torres, fue golpeada, violada y estrangulada, y su cuerpo lanzado a la maleza.
Según el Procurador, el homicida Jorge Rosales Piña fue ubicado en la zona donde ocurrió el asesinato de la joven, ya que era chofer de transporte urbano y reportó a sus superiores el estallido de una llanta al impactarla contra la banqueta.
“Al descubrir el cadáver de la mujer, nuestros expertos detectaron huellas del impacto del minibús, pero él niega que haya cometido el crimen, por lo que mantenemos abierta la investigación”. (Fuente: Periodistas Quintana Roo)

Comentarios en Facebook