Exhiben a candidatos priistas por actitud prepotente de guaruras

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CHETUMAL, MX.- Con alarde de prepotencia y valemadrismo, los guaruras y achichincles de los candidatos de la alianza PRI-Verde Ecologista ocasionaron un verdadero despelote durante su evento de inicio de campaña en Chetumal, realizado en el céntrico parque de “Las Casitas” de esta capital, insultando con su actitud despótica a los conductores chetumaleños que tuvieron la mala fortuna de circular por la Avenida Carranza, una de las más importantes arterias viales de la ciudad.


Mientras los candidatos del PRI y del Verde al Senado y a las diputaciones federales declamaban discursos dulzones, triunfalistas y llenos de demagogia al estilo de “daremos todo por el pueblo”, la verdadera cara de los priistas se vivía en las calles, donde los guaruras de candidatos y funcionarios hacían de las suyas, atravesando las lujosas Suburbans y Traverse en doble fila, impidiendo a los desesperados ciudadanos la circulación.
Como si estuvieran sordos, los prepotentes gorilones y otros achichincles al servicio de la élite priista ignoraban olímpicamente los reclamos y pitidos de los automovilistas y no movían sus vehículos, valiéndoles un cacahuate el enojo popular.
Mientras tanto, los ciudadanos enfrascados en un embotellamiento poco común en la capital quintanarroense -las colas de autos se alargaban desde el parque hasta la avenida Andrés Quintana Roo- tardaron hasta media hora en cruzar por el lugar, nomás por el valemadrismo de la gente del PRI.
En el parque, al momento de que un indignado ciudadano no dejaba de sonar el claxon y visiblemente enojado profería maldiciones, el candidato a diputado por el Distrito II, Raymundo King de la Rosa, le echaba porras y loas al candidato a Senador Jorge Emilio González Martínez, el “Niño Verde”.
Raymundo aplaudió y reconoció públicamente al “Niño Verde”, pese a que su impopularidad es tal que los mismos priistas renegaron en su momento de su candidatura, y que no tiene el mínimo arraigo en Quintana Roo. Muchos ciudadanos, “acarreados” seguramente, también le echaron porras y aplausos efusivos, pese a que no tienen ni la menor idea de quién es el lamentablemente famoso “Niño Verde”.
Y ante el despapaye, no hay autoridad alguna que acuda al sitio a poner orden; el alcalde Carlos Mario Villanueva Tenorio al parecer ni interés tuvo en el evento, mucho menos en que sus ciudadanos gozen del derecho al libre tránsito, coartado por los caprichos de los candidatos priistas, que sin ser electos todavía ya actúan como verdaderos “reyes” de la ciudad. (Fuente: Periodistas Quintana Roo)

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