CHETUMAL, MX.- La embarcación en la que fallecieron dos menores de edad en la laguna de Bacalar, operaba de manera irregular y por la matrícula, seguramente fue registrada en otro país, informó el Capitán de Puerto de Chetumal, Álvaro Flores Parra.
CHETUMAL, MX.- El agente del Ministerio Público del Fuero Común destacamentado en la ciudad de Bacalar giró la orden de investigación y detención en contra de Pedro Viera García, el piloto de la pequeña embarcación que se hundió en la laguna de Bacalar, a la altura de la comunicad de Pedro A. Santos, por sobrecupo.
Mientras que su suegro, Agustín Osorio, presentado ayer tras el funesto accidente, fue dejado en libertad luego de rendir su declaración ministerial.
El día de hoy, la Procuraduría General de Justicia del Estado informó que la autoridad ministerial destacametada en Bacalar giró la orden de investigación y detención en contra de Pedro Viera García, piloto de la embarcación color roja, de aproximadamente 15 pies de eslora, con la leyenda “StarCrafft” y matrícula 7611AC, que se hundió el día de ayer por la tarde por sobrecupo, ya que su capacidad es para cinco personas y al momento del accidente llevaba 17.
Hasta el momento la Procuraduría General de Justicia del Estado aún no termina el peritaje del fatal accidente, pero la hipótesis que se maneja en los pasillos de la corporación policial es que el principal factor fue que la embarcación llevaba 17 personas, de los cuales 11 eran menores de edad.
Según la hipótesis, el día de los hechos, el capitán Pedro Viera García se percató que empezó a entrar agua en la lancha y por su falta de experiencia aceleró más pensando que con eso evitaría que se llenara la embarcación, pero lo único que logró es que la lancha se elevara y se hundiera en la laguna.
La negligencia dejó un saldo de una niña y un niño de cinco años de edad fallecidos por ahogamiento, mismos que responden a los nombres de Rodrigo Azuara Gómez y Yareli Alejandra Gómez Montejo, con domicilio en el poblado de Limones, municipio de Bacalar.
Agustín Osorio, de 47 años de edad, suegro del piloto de la lancha que se hundió, mismo que fue detenido el día de los hechos, fue dejado en libertad después que rindió su declaración ministerial, porque no tuvo nada que ver con el accidente.
Las autoridades judiciales lo único que querían es que Agustín Osorio entregara al presunto responsable del fatal accidente, pero no fue posible, ya que el ahora presunto homicida culposo ya había sido asesorado por un abogado para que no se entregara.
Sin embargo, la Policía Judicial del Estado anda ya en busca del presunto homicida para el deslinde de responsabilidades.
Como se recordará, el fatal accidente ocurrió luego de que la embarcación zarpó desde el muelle de un predio aledaño al parque UchbenKah, para cruzar la laguna de Bacalar en dirección hacia un isla llamada “San Martín de Porres”, ubicada frente al rancho de donde salieron, con la intención de visitar a un pariente de las dos familias que padecieron el percance. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
Y ahora se sabe que esa lancha es propiedad de Jay Larry Ray y de Jacob BoykRay Bustillos, de ascendencia extranjera, dos particulares que disputan un predio de hectárea y media al parque ecoturísticoUchbenKah, en el ejido Pedro Antonio de los Santos, terreno del cual zarpó la embarcación.
Tras la trágica muerte de dos niños de cinco años de edad, al volcarse la lancha en la que paseaba un grupo de 17 familiares en el extremo norte de la laguna de Bacalar, el Capitán de Puerto explicó que la embarcación de aproximadamente 15 pies de eslora, con la leyenda “StarCrafft” y matrícula 7611AC, piloteada por Pedro Viera García, de 25 años de edad, realizaba el servicio de manera ilegal.
El entrevistado explicó que la matrícula que presenta la lancha no es nacional, pues en caso de ser una matrícula del estado de Quintana Roo tendría el número 23 al inicio, y en caso de pertenecer a la jurisdicción de la Capitanía de Puerto de Chetumal, que abarca Chetumal, Bacalar, Majahual y Xcalak, tendría después del 23 el número 06.
Flores Parra opinó que la tragedia fue producto de una negligencia de quien realizó el servicio y una omisión de las personas de la familia, el primero por llevar 17 personas en una embarcación con capacidad máxima para cinco personas, y de los segundos por la falta de precaución, al no tomar las medidas de seguridad necesarias.
“De acuerdo a las gráficas, esa embarcación no tiene compartimientos de aire, no está adecuada para realizar ese tipo de servicios, ese tipo de lancha es de recreo particular, cuando mucho para cinco personas”.
El Capitán de Puerto refirió que los accidentes no nacen, sino se hacen, al momento de señalar que los usuarios deben preguntar a los operadores si cuentan con capacitación, si tienen permisos, chalecos salvavidas, aros salvavidas, radio de comunicación, botiquín de primeros auxilios, que son las principales medidas de seguridad marítima.
Luego de la lamentable pérdida de dos menores de edad, Álvaro Flores comentó que la embarcación debe estar en manos del Ministerio Público del Fuero Común (MPFC) para el deslinde de responsabilidades del operador, y posteriormente deberán turnarla a la Capitanía de Puerto para su resguardo, hasta que se regularice su situación, donde también será sancionado el propietario, por realizar el servicio de turismo náutico sin los permisos correspondientes.
Flores Parra comentó que es la primera vez que detectan una lancha que trabaje de manera irregular en tres años y medio que lleva en el cargo, y explicó que la Laguna de Bacalar está dentro de la jurisdicción de la Capitanía de Puerto de Chetumal, por lo que aleatoriamente se realizan visitas de inspección a los prestadores de servicios y particulares, para que tengan todo tipo de seguridad en las embarcaciones.
Es necesario mencionar que la tragedia se presentó a 100 metros del balneario UchbenKah debido al sobrecupo que había en la lancha, que sumado a la inexperiencia del piloto, ésta volcó causando que los ocupantes cayeran al agua, entre ellos los menores de edad, quienes no llevaban puestos los chalecos salvavidas, al igual que las personas adultas. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)
CHETUMAL, MX.- Representantes del parque eco turístico Uchben Kah, puntualizaron que el accidente acuático donde murieron dos niños de cinco años de edad fue a causa de un lanchero “pirata” que prestaba sus servicio en un predio adjunto.
Felipe Lara Bahena, presidente de la operadora eco turística, Uchben Kah, precisó que el parque nunca prestó este servicio.
“Los hechos ocurrieron en un predio que nos tienen invadido el señor Jacob Ray Bustillos junto con su padre de nombre Joe Larry y donde estas personas tienen en este predio unos veladores a quienes sus familiares los vinieron a visitar y de ahí se fueron a dar un paseo”.
Felipe Lara Bahena, relató que la lancha donde ocurrió este hecho tiene una capacidad para solo cinco personas y cuando ocurrió el accidente esta embarcación transportaba a 17 personas entre ellos a 11 niños.
De hecho fue personal del parque quienes prestaron ayuda a los accidentados como lo asegura Miguel Ángel Aldana Rivera, gerente operativo del sitio turístico.
“Empezamos a sacar a la gente de hecho me trajeron a una señora que venía inconsciente por lo que de inmediato le di respiración de boca a boca y logre reanimarla posteriormente sacaron a otra señora y también logre ayudarla mientras tanto saque a una niña de seis meses y empezó a sacar agua la niña aunque los otros dos niños desafortunadamente murieron”.
Después del accidente la Dirección Estatal de Protección Civil y la del Municipio de Bacalar anunciaron operativos en todos los centros turísticos del sur del estado para comprobar que los prestadores de servicios acuáticos cuenten con todas las medidas de seguridad. (Fuente: Enfoque Radio)