TULUM, MX.- Con un proceso iniciado de juicio político en su contra en el Congreso de Quintana Roo por un presunto desvío de recursos y diversas irregularidades en su administración como asignación de obras sin licitaciones, la Alcaldesa de Tulum, Edith Mendoza Pino, afirma en una entrevista con el diario Reforma que, pese a todo, ‘no hay nada grave’.
Con un plantón de trabajadores del ayuntamiento abajo del Palacio Municipal desde el pasado 17 de abril, e innumerables críticas a su gestión, Mendoza Pino asegura que concluirá su gestión en el plazo que marca la Constitución, y que no hay elementos para que proceda el juicio político en su contra.
“No hay nada grave en lo que me están señalando”, externó en entrevista.
En la entrevista que el periódico capitalino publica y que está firmada por el corresponsal Sergio Caballero, la Alcaldea señaló que puede solventar las observaciones por 14 millones de pesos, y sobre las obras dijo que, si bien algunas no fueron licitadas, se trata de una práctica común.
“El 90 por ciento no lo hace (licitar las obras). No es delito grave”, sostuvo.
La priista aseveró que hacia afuera tiene una mala imagen, porque se la han creado, pero que en Tulum la gente está conforme.
“La gente está contenta, lo que digan fuera, debería de importarme, pero cuando se gobierna pensando como ciudadano, no importa”.
Respecto al polémico balcón de la Presidencia Municipal, dijo que su costo fue de 405 mil pesos, y que se modificó porque el anterior presentaba una grieta y estaba demasiado pequeño.
“Al llegar a la administración, aparte de no encontrar nada, hallamos un balcón que estaba como agrietado. Aprovechando este detalle que tenía el balcón, decidimos que se hiciera más grande, que pudiera servir”, manifestó.
Sobre sus viajes a las ferias turísticas de Londres, Madrid y Berlín, aseguró que forman parte de sus responsabilidades de promoción de Tulum.
“He comprobado que la presencia de la Presidenta Municipal, inclusive lo he comentado con los compañeros que tienen destinos, que vayan, porque es importante la presencia del Presidente Municipal. Eso le da confianza a los turoperadores”, dijo.
Presumió que, por sus viajes, Tulum llegó al 100 por ciento de la ocupación hotelera en la pasada Semana Santa, cuando en años anteriores no rebasaba el 70 por ciento.
Por otra parte, señaló que la aparición de un “stripper” en el balcón de la Presidencia Municipal, es algo sano.
“Yo no le puedo prohibir que haga algo sano, como es bailar”, ironizó.
Sobre la pavimentación de las calles que van a su nueva casa, manifestó que no fue por ella, sino por sus vecinos.
“Qué culpa tienen los vecinos para que no arreglen lo que es mi calle. Ellos no tienen la culpa”.
Y aunque reconoció que hay poca obra en Tulum, señaló que obedece a que hay pocos ingresos y que algunas obras que ha gestionado han sido con recursos federales, como la imagen urbana de la comunidad indígena de Cobá y la ciclopista. (Fuente: Sergio Caballero/Agencia Reforma)
