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Otra de las incógnitas tras el proceso electoral, es el futuro de la relación entre Roberto Borge y Julián Ricalde.
Hasta ahora, ha sido una relación mucho más que cordial entre ex presidente estatal del PRI y el ex presidente estatal del PRD.
Julián lo dijo al tomar protesta. “No ve voy a pelear con el Gobernador”. Y ha cumplido.
Al Gobernador, Julián le sido muy útil pues el Presidente Municipal de Benito Juárez ha evitado un frente de alcaldes “opositores”, apoyó para que Gregorio Sánchez no sea candidato a senador de las “izquierdas” y ha mantenido serena a la bancada perredista en la Legislatura local.
A cambio Ricalde no ha sido molestado, como ha ocurrido con otros alcaldes que han osado decir no al Gobernador.
Sin embargo, en la reciente jornada electoral el PRI quedó en ridículo en Benito Juárez, en donde perdió las tres elecciones: la de presidente, senadores y diputado. Este municipio se consolidó como el bastión anti-PRI de Quintana Roo.
Al Gobernador y al PRI les va a costar mucho trabajo remontar en Benito Juárez, en donde, si bien el efecto AMLO fue contundente, Ricalde tambien tuvo algún mérito.
A partir del 2 de julio pasado, el verdadero adversario del Gobernador y del PRI es Julián Ricalde.
Pero, por supuesto que Ricalde no quiere ser adversario del PRI y mucho menos del Gobernador.
Posdata: Y que el Gobernador @betoborge respondió de inmediato a este ROMPEOLAS. Aquí el ‘tuit’

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