CHETUMAL, MX.- La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) identificó oficialmente los restos de Daniel Gutiérrez Sánchez, los cuales fueron encontrados dentro de un pozo de riego de los cañales de la comunidad de Sergio Butrón Casas, durante diciembre de 2010.
Otros siete resultados más de ADN, entre ellos dos de paternidad, han sido anexados a los expedientes respectivos para la continuidad de sus investigaciones.
Las autoridades indicaron que los resultados de genética forense fueron obtenidos días después de que concluyera la Reunión Nacional de Médicos Forenses, celebrada en la Ciudad de México, y en donde estuvieron los directores generales de servicios periciales y coordinadores de cada Estado de la República.
Destacaron que la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, en su departamento de especialidad, entregó ocho resultados en total, cuyos casos fueron enviados desde hace por lo menos dos años. Dos de ellos pertenecen al municipio de Felipe Carrillo Puerto y donde se espera se cierren sus investigaciones.
Otros seis son de Chetumal, dos que fueron solicitados como prueba de paternidad, y otros cuatro que cuentan con averiguación previa, en distintos casos. Resaltaron que una de ellas pertenece a la identificación de una osamenta encontrada en un pozo de riego, en los cañales de la comunidad de Sergio Butrón Casas.
Las pruebas arrojaron que los restos óseos corresponden a Daniel Gutiérrez Sánchez, cuya desaparición fue reportada por su madre María Elena Sánchez en junio de 2010. Las autoridades ya iniciaron los trámites para la entrega.
La averiguación previa del caso es la PUC-191/12-2010, en la cual se anexaron pruebas que comprueban el homicidio, debido a que se rastrearon materiales de un arma blanca, al parecer de un machete. El homicida aún está en libertad, destacaron.
Recordemos que el hallazgo de los restos humanos se registró el 9 de diciembre de 2010, cuando un campesino de la comunidad de Sabidos descubrió que su perro jugaba con un pedazo de piel humana, por lo que notificó el hecho a las autoridades. Con su ayuda localizaron el pozo de riego, ubicado a escasos 150 metros del cruce denominado “Cuatro Caminos”, que comunica a Sergio Butrón Casas con la carretera a Nicolás Bravo.
Dos días después, el sábado 11 de diciembre, las autoridades pudieron extraer sedimento con cabellos humanos. Fue hasta el 18 de diciembre cuando por fin se pudo extraer gran parte de la osamenta del interior del pozo, y al parecer el cuerpo fue “molido a golpes”, pues tenía el cráneo destrozado, pero además estaba embolsado, por lo que la Policía Judicial del Estado (PJE) comenzó con las investigaciones correspondientes. (Fuente: Diario de Quintana Roo)
