CANCÚN, MX.- Ante la falta de señalamientos directos por parte de los vendedores ambulantes de Zona Hotelera que son extorsionados, los tres presuntos “Zetas” que fueron detenidos por la Policía Turística, podrían quedar en libertad al vencer el término de 48 horas.
El pasado viernes por la tarde, Seguridad Pública dio a conocer la detención de tres presuntos integrantes del grupo delictivo de “Los Zetas”, que se dedicaban a extorsionar a vendedores ambulantes de la Zona Hotelera.
Los detenidos fueron identificados como Mario Enrique Ramírez Chérrez, Daniel Guzmán Arroyo y Giovanni Alexander Fernández Chacón.
Según el comunicado de Seguridad Pública, elementos de la Policía Turística se trasladaron a playa Marlín para verificar una riña, fueron informados que un grupo de vendedores ambulantes había golpeado a tres sujetos que les estaban exigiendo la “cuota” de la semana a todos los vendedores ambulantes como pago del “derecho de piso” para el grupo de “Los Zetas”.
Posteriormente, los tres sujetos señalados fueron detenidos y dijeron trabajar para el grupo delictivo, para un sujeto al que únicamente conocen como “El Gordo”, a quien contactan en el área de playas para entregarle la recaudación de las extorsiones a los ambulantes a quienes cobran 500 pesos semanales para dejarlos vender su mercancía.
Los tres detenidos fueron puestos a disposición del Ministerio Público del Fuero Común por el delito de extorsión.
Sin embargo, hasta el día de ayer no se habían presentado a interponer la denuncia correspondiente los vendedores ambulantes afectados, lo que complica determinar la situación jurídica de los detenidos
Y es que según explicó el director de averiguaciones previas Carlos Arturo Alvarez Escalera, el delito de extorsión es por querella, es decir, que se necesita que el o los agraviados denuncien los hechos y señalen a los detenidos del delito en mención.
Por ello, se esperaba que los tres sujetos detenidos quedaran en libertad al término de las 48 horas, pues al no existir un señalamiento directo en su contra, no podían ser consignados por extorsión y aunque fueran consignados a un juez penal, por ultrajes a la autoridad; quedarían en libertad con el pago de una fianza. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)

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