Así como la base de toda organización social es la familia, dentro de la estructura de gobierno en nuestro País lo es el Municipio, el cual es la base de la organización territorial, de su organización política y administrativa. En la práctica esta autonomía (si es que la hay), no ha pasado de los discursos y las buenas intenciones. En este artículo analizaremos cómo han sido gobernados los Municipios más representativos de Quintana Roo.
1.- Empezaremos por la casa (Benito Juárez), el motor de nuestro Estado; aquí hemos tenido de todo, pero desde que llegó a la Alcaldía Magaly Achach, se demostró que en Benito Juárez todo podía pasar y pasó. Padecimos el gobierno de un verdadero “orate” en la persona de Juan Ignacio García Zalvidea, el tristemente célebre “Chacho”, que a la fecha todavía sigue dando patadas de ahogado en busca de los reflectores. Para nuestra desgracia llegó Francisco Alor, un verdadero pillo y acabó con todo lo que encontró a su paso, hizo del Ayuntamiento un negocio personal muy rentable, todo fue posible siempre y cuando le llegaran al precio; no sé ahora si esté disfrutando del dinero acumulado o lo esté gastando en tratamientos médicos, ya que parece que no anda muy bien de salud. Siguió el “cantante”, “pastor” y “empresario” con su séquito de cubanos (as), Don Gregorio Sánchez; hizo del Ayuntamiento un desgarriate, un ente sin pies ni cabeza, ya que el Sr. sólo pensaba en ser Gobernador; los resultados, un desorden total y el quebranto financiero del Municipio, todavía a la fecha existen faltantes de dinero; claro, siempre contó con el apoyo del “mago “ de las finanzas , Carlos Trigos hoy acusado de peculado. Finalmente ahora gobierna el “bigotó”, “charro” y “mal agradecido” Julián Ricalde. De este hombre nunca se sabe que esperar, un día es perredista y despotrica contra el Gobernador del Estado, otro día es “conciliador” y se toma la foto con Don Roberto Borge, ahora dice que no lo descarten que podría entrarle a la diputación, él ya tiene un objetivo en el futuro cercano, va por la silla grande del Estado, mientras tanto los benitojuarenses, bien gracias. Esto es Cancún y lo que falta.
2.-De Solidaridad, hay mucha tela de donde cortar, este noble Municipio ha sido generador de varios integrantes de la clase política–empresarial, es decir, de aquellos servidores públicos que al amparo del poder se vuelven “exitosos” empresarios. Cómo olvidar al “brillante” Miguel “Ratón” Martín Azueta, que acumuló y ostentó una gran riqueza, se sentía un ser divino y por mucho tiempo presumió de sus hazañas, parece que actualmente la riqueza de la que tanto ostentó ya lo ha abandonado, en fin lo del agua al agua. Gabriel Mendicuti Loría se propuso dos objetivos al llegar a la Presidencia Municipal, el primero, jamás volvería a ser Gerente de una empresa materialista, lo logró, ahora es el dueño de su propio grupo de empresas materialistas; el otro, acumular más propiedades y dinero que Don Miguel “Ratón”, con la diferencia que él sería mejor administrador, también lo logró; políticamente sigue vivo, aunque él comenta a sus llegados que ya se quiere retirar, que está “cansado”, la realidad es que ya fue Secretario de Infraestructura y actualmente de Desarrollo Agrícola, que pasaría si no estuviera “cansado”. También en Solidaridad gobernó “el amigo de todos”, Román Quian , este hombre gris sólo se dedicó a jugar al político y a preparar su camino a las grandes ligas de la política estatal , eso sí, nunca se olvidó de cuidar y multiplicar los negocios de su mentor, amigo y consejero, el “cansado “Gabriel Mendicuti”. Don Filiberto Martínez como que todavía no alcanza a cuajar, lo malo es que cuando por fin alcance el 100% de su potencial político, su periodo como Alcalde habrá terminado; ni hablar, faltó tiempo.
3.- Hablar de Cozumel es como entrar a otra dimensión, tierra de Gobernadores y de muchos “servidores públicos”, los cozumeleños se cuecen aparte. Hay que reconocer que en este Municipio la mayoría de sus ex Alcaldes, caminan por la Isla sin mucha preocupación y los ciudadanos los saludan y los respetan, es de notarse que la mayoría de éstos siguen radicando en Cozumel. Pero no todo puede ser perfecto. Después de muchos trienios con Alcaldes que son calificados como de regulares para arriba, llegó el hoy flamante Secretario de Turismo, Juan Carlos González Hernández , el cual desmanteló y llevó a la bancarrota al Municipio. Su objetivo y el de su camarilla fue obtener dinero como objetivo principal, hacer de la Tesorería Municipal su caja chica para solventar sus excesivos gastos en alcohol y sostener su ludopatía; pasó por encima de leyes , reglamentos y todo aquel que se opusiera a sus objetivos; gobernó de forma visceral, resultados: un Ayuntamiento totalmente desfondado. Los cozumeleños todavía no asimilaban las trapacerías de Juan Carlos González cuando apareció en la escena un muchacho enjundioso y simpaticón, Aurelio “Lito” Joaquín, al cual se le veía como un político con mucho futuro, pero desafortunadamente “Lito” supera por mucho a Juan Carlos González . No hay cozumeleño que se exprese bien de él, solo se le menciona en las pláticas cotidianas como el protagonista de hechos ridículos y vergonzosos, sus declaraciones carecen de forma, fondo y sustento; sus “asesores” sólo están preocupados por cobrar sus quincenas. Lito ha perdido todo, no se le cree, no se le respeta, no es de fiar, sus paisanos solo esperan pacientemente que termine su período. Es el Alcalde de las declaraciones, de los planes sin aterrizar, de la inversión “millonaria”, del “turismo”, del bla,bla,bla.
4.- No podemos dejar de comentar lo que ha pasado en Othón P. Blanco. Los chetumaleños han visto de todo, desde Alcaldes que nunca le tuvieron amor a la camiseta como Eduardo Ovando que se ha pasado la vida soñando con ser Gobernador, oportunistas como Javier Díaz Carvajal y Cora Amalia Castilla, a los que solo veían por sus intereses personales y los de su camarilla. El Alcalde que más empeño le puso para llenarse los bolsillos, con el dinero público fue el siempre “simpático” Andrés Ruiz Morcillo, con toda la “experiencia” en finanzas públicas, acumulada durante su paso como Director de CAPA, saqueó las arcas Municipales, entregó el Ayuntamiento totalmente quebrado a su sucesor y tranquilamente tomó su nueva encomienda, donde ahorita preparara su estrategia para mantenerse cerca del dinero, los reflectores y continuar en lo suyo, el “servicio público”. Finalmente llega a la Presidencia Municipal Carlos Mario Villanueva Tenorio, este muchacho de político no tiene nada, su carrera ha estado cimentada en el peso de su apellido y en la desgracia de su padre. Como Diputado Local fue totalmente gris y como Presidente Municipal no ha podido hacer nada, para su desgracia Andrés Ruiz le entregó un Ayuntamiento en ruinas, que sumado a su total inexperiencia ha logrado unir a los chetumaleños, pero en su contra.
Después de este breve análisis de la actuación de nuestros alcaldes, solo quedan algunas preguntas ¿Hasta cuándo seguiremos observando pasivamente el saqueo y destrucción de nuestros Municipios? ¿Son estos la clase de servidores públicos que merecemos? ¿Estamos condenados a que reine en Quintana Roo el imperio de la corrupción y de la impunidad?
Es tiempo de realizar acciones con el respaldo de la sociedad civil organizada , la paciencia se está terminando.
Cancún, Quintana Roo, a 14 de enero del 2013