Que el pasado viernes y sábado, e incluso el domingo,  hubo artillería a discreción sobre los consejeros estatales perredistas.

Y es que, a como sea, se trató de dar vida artificial en el Consejo estatal del PRD  a Gregorio “ Greg” Sánchez para que influyera en la elección de la nueva dirigencia del sol azteca en Quintana Roo.

Finalmente, los “cañonazos” tuvieron cierto efecto y lograron que con una ventaja de dos consejeros, Rafael Esquivel Lemus se convirtiera en secretario general del PRD de Quintana Roo, y se impusiera al también chetumaleño, Roger Pereza Tamayo.

Pero, de acuerdo con  los enterados, daba lo mismo que quedara Esquivel o Pereza, pues ambos desde hace mucho están en la órbita del Gobierno del estado.

Y lo peor, para el perredismo, es que desde hace mucho el PRD está infiltrado por el Gobierno del estado y por el PRI.

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