El negocio de las concesiones de los servicios públicos municipales – Por El Cozumeleño

0
22

En los últimos meses  se han presentado en el Ayuntamiento de Cozumel, una serie de empresas que están interesadas  en obtener la concesión del alumbrado público de la Isla. Recientemente se informó que se había solicitado al Congreso del Estado la aprobación para realizar la respectiva licitación.  Es innegable que el alumbrado público de la Isla es deficiente, sólo habría que reflexionar sí es una buena opción concesionar dicho servicio.

En  Mérida, durante el trienio de Angélica Araujo, se licitó y adjudicó la concesión del alumbrado público a la empresa ABC Leasing S.A. de C.V. Según se dice, el costo mensual de dicha concesión es de aproximadamente 8 millones de pesos y tendrá una duración de 5 años. Al término de la concesión, el Ayuntamiento de Mérida habrá pagado la nada despreciable cantidad de 480 millones de pesos, seguramente será más, ya que el contrato debe de considerar incrementos acordes con la inflación. Las quejas por la mala calidad de las luminarias instaladas son frecuentes, incluso la Administración actual está valorando el inicio de un proceso administrativo para revocar la concesión.

En Chetumal, siendo Alcalde Andrés Ruiz Morcillo, se concesionó el alumbrado público por 15 años  a la empresa Avances Lumínicos S.A. de C.V. , aunque no disponemos de datos precisos sobre los pagos mensuales que el Ayuntamiento de Chetumal hace a la empresa. Lo que no se puede ocultar son las constantes quejas ciudadanas por las deficiencias del servicio. Los argumentos centrales que justificaron la concesión fueron la calidad del servicio y el beneficio económico para el Ayuntamiento. Parece que ninguna  de las dos premisas se están cumpliendo.

El Ayuntamiento de Solidaridad  también concesionó el alumbrado público de Playa del Carmen a la empresa Grupo Castaldi  S.A de C.V. por 10 años, el proceso de adjudicación fue polémico y tampoco se ve a la fecha un beneficio tangible para los playenses.

Teniendo estos 3  antecedentes, aunque existen muchos más, no se ve como una opción viable  la concesión del alumbrado público para la Isla de Cozumel, aunque seguramente las justificaciones de rigor se puedan tener, (nos referimos a la aprobación del Congreso del Estado y del  H. Cabildo de Cozumel), es muy difícil que estas aprobaciones no se den, si consideramos que el partido político al que pertenece el Alcalde Aurelio Joaquín González tiene mayoría en el Congreso y en su Cabildo.

En Cozumel no se tienen buenos antecedentes de las concesiones otorgadas a particulares por el H.  Ayuntamiento. El servicio de recolección de basura y tratamiento final de los residuos sólidos fue concesionado a la empresa Promotora Ambiental  S.A. de C.V.  En este servicio no se han tenido quejas significativas, sin embargo, el Ayuntamiento no cumple en tiempo y forma con los pagos mensuales a la empresa y se corre el riesgo de la suspensión del servicio. Sería bueno revisar a detalle  esta concesión,  que fue otorgada  en el trienio de Juan Carlos González.

Otra polémica concesión otorgada por el ex Alcalde Juan Carlos González fue la de los parquímetros en el malecón de Cozumel, la cual la obtuvo la empresa Meters  S.A. de C.V. en el año 2010.

La constante en el otorgamiento de estas concesiones es la falta de transparencia en los procesos de adjudicación y las condiciones desventajosas para los Municipios, parecería que lejos de buscar el mayor beneficio para los Ayuntamientos y por ende a sus habitantes, solo se busca maximizar las utilidades de los concesionarios; no podemos  pasar por alto que por las características en que las concesiones se otorgaron siempre queda la impresión de que los servidores públicos que intervinieron en los procesos recibieron algún beneficio económico. Para rematar la Suprema Corte de Justicia ha declarado el cobro del DAP (Derecho de Alumbrado Público) como inconstitucional,  ya que el beneficio de este servicio no es solo para los residentes u ocupantes de los inmuebles que se ubican en las calles, sino también lo reciben los peatones o automovilistas que transitan por las vialidades, esto último hace imposible el cuantificar el cobro de dicho derecho , ya que también tendrían que pagar los peatones y automovilistas , lo grave es que el DAP es la fuente de pago al concesionario; si cualquier hijo de vecino se ampara contra este derecho dejará de pagarlo, luego entonces ¿de dónde van a salir los recursos para pagarle al concesionario?

Para finalizar, Cozumel es un municipio en donde los proveedores de  luminarias para alumbrado público han encontrado un excelente nicho de mercado: primero se colocaron lámparas para reponer las dañadas en el huracán Wilma  en  2005  siendo Presidente Municipal Gustavo Ortega, en el trienio de Juan Carlos González se sustituyeron las lámparas anteriores por lámparas de supuesta mejor calidad y eficiencia , aquí habría que preguntarse ¿ dónde quedaron las lámparas que se retiraron ? tal vez no eran lo último en tecnología pero pudieron colocarse en las colonias; el Gobierno del Estado en el sexenio de Félix González ejecutó sendos proyectos de  iluminación en la Av. Benito Juárez, Carretera Costera Norte, Av. Félix González y Av. Pedro Joaquín, finalmente el actual Alcalde Aurelio Joaquín decide que hay que empezar de nuevo y ahora concesionará el alumbrado público. Si usted tiene algunos ahorros, considere la opción de convertirse en distribuidor de luminarias para alumbrado público, en Cozumel esto resulta un excelente negocio.

Comentarios en Facebook