CHETUMAL, MX.- Mientras sus compañeras de encierro en el área femenil del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Chetumal tienen que cumplir con un riguroso reglamento para no ser “amonestadas” o castigadas durante el tiempo que purguen condena, la polémica ex novia del otrora oficial mayor del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, Benito Ang Gómez, hoy prófugo de la justicia, Maritza Georgina Polanco Cáceres, vive como una verdadera “reina” tras las rejas, gracias a la amistad que ha entablado con los líderes de la llamada “Comitiva”, Raúl Alvarado Pacheco y Carlos Hernández Ramón. Datos recabados por el reportero al interior del penal confirmaron que la antes citada, de la noche a la mañana, adquirió diversos privilegios que contrastan mucho con las normas que debe cumplir, como lo que supuestamente es, una reclusa “común y corriente”.
En este sentido, fuentes dignas de crédito manifestaron que la acusada de ser cómplice de su “novio” vive en condiciones “inmejorables”, y es así como en su celda, de las llamadas “V.I.P.”, dispone de numerosas comodidades que sus amigos del “autogobierno” le han brindado a últimas fechas, e incluso, tiene la libertad de no sólo ser visitada por quien quiera y a la hora que quiera, sino que también puede hasta pedir pizzas, tacos al pastor, cócteles y demás alimentos “a domicilio”, sin alguna restricción.
Al respecto, se supo que en su encierro, mismo que comparte con una interna de nombre “Elsy”, dispone de una pantalla de plasma de 21 pulgadas, cuatro ventiladores, agua caliente, diversos muebles (llámese una cama, un comedor y un refrigerador), amén de que en su lujoso tocador abundan perfumes de marca, pinturas de uñas, secadoras y “planchas” para el alaciado del cabello, relojes, y costosos artículos de maquillaje.
Aunado a todo esto, quien en su momento fuera parte del voluntariado del DIF municipal y cobrara en la nómina del Ayuntamiento de OPB ha desatado la justificada inconformidad de sus compañeras internas y no es para menos, ya que, según se pudo averiguar también, a las de nuevo ingreso no las dejan pasar al patio, e incluso, cuando es día de visita no les permiten acercarse al área de comedores y ni siquiera pueden presenciar los eventos deportivos que se realizan los fines de semana.
No obstante lo anterior, Polanco Cáceres puede hacer lo que se le antoje y es así como puede “pasear” por cualquier parte del penal y en el momento que lo desee sin ser molestada.
Además de esto, recientemente se le autorizó la visita de cualquier persona, siendo que ni sus familiares ni sus amigos son revisados al ingresar y por si fuera poco, dado que supuestamente está prohibido, entran y salen libremente de su celda en la que conviven a gusto por varias horas, e incluso, pueden quedarse a dormir y pasarse un fin de semana completo.
Asimismo, trascendió que, con la venia del “comandante Piña”, la polémica reclusa puede hacer ejercicio en la mañana, en la tarde y en la noche, mientras sus compañeras están confinadas.
Como se recordará, Polanco Cáceres está en el Cereso acusada de defraudar con 13 millones de pesos al ex oficial mayor del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, Benito Ang Gómez, quien por cierto está en calidad de “ilocalizable”.
Estos millones de pesos fueron producto de un fraude que realizaron Polanco Cáceres y Ang Gómez contra el empresario chetumaleño Víctor Dogre. Todo esto ocurrió cuando Maritza y Benito eran pareja sentimental.
Sin embargo, Benito Ang le confió el dinero del negocio a su querida amante, la cual compró terrenos y lujosos carros, además de alhajas de miles de pesos, con ese dinero, el cual por obvias razones no pudo devolver cuando el ex oficial mayor se lo requirió para devolvérselo al empresario, por lo que el ex funcionario municipal procedió a denunciarla.
En el desahogo de pruebas se supo que ambos habían estado involucrados en el mismo caso, pues Maritza “boqueó” que Benito Ang también estaba involucrado, por lo que el juez Segundo Penal libró la orden de aprehensión contra Ang Gómez, quien abandonó la ciudad de Chetumal y hasta el momento no ha sido ubicado.
El negocio que realizaron estas personas fue por los permisos que supuestamente le otorgaron al empresario para la creación de gasolineras, cuando Benito Ang fungía como oficial mayor, pero al crearse los terrenos se supo que los permisos nunca fueron aprobados, por lo que se derivó la denuncia y hasta el momento mantiene involucrada a esta pareja.
Esta información pesa contra Maritza Polanco en la causa penal 338/2012; sin embargo, semanas después de su detención, el 29 de septiembre de 2012, se informó que otro empresario de nombre Carlos Alberto Acosta Gutiérrez interpuso otra denuncia por el mismo delito (fraude), por medio millón de pesos, contra Polanco Cáceres, la cual quedó asentada en la averiguación previa 3930/10-2012  y se desconoce si ya fue consignada. (Fuente: Diario de Quintana Roo)

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