De acuerdo con la versión del levantado, Martín Iracheta Peralta, de 20 años de edad, originario de Monterrey, su odisea inició cuando con dos de sus amigos ingresaron al antro denominado “La Rumba Caribe” y en determinado momento éstos desaparecieron, por lo que cuando se disponía a abandonar el establecimiento se le acercaron dos individuos que lo invitaron a seguir la parranda y regresó a su mesa, en la que consumieron varias copas y dosis de cocaína.
En este contexto, las horas pasaron y al filo de las seis de la mañana le preguntaron si llevaba suficiente dinero, pues ya había consumido demasiada droga, a lo que él contestó que no tenía, sin embargo, los sujetos le dijeron que no había problema y salieron del antro para abordar un auto, al parecer marca Volkswagen, sin especificar el tipo, y una vez a bordo lo trasladaron bajo engaños a una casa donde supuestamente continuarían drogándose y consumiendo alcohol, pero por accidente escuchó cuando uno de ellos hizo una llamada telefónica en la que dijo: “Ya lo tenemos listo, lo vamos a encintar y le damos piso”.
Al escuchar que sería ejecutado, empujó a uno de los sicarios y salió corriendo de la casa de seguridad hasta llegar a las inmediaciones de la bodega de conocida empresa de refrescos, donde se percató que sus captores venían tras él y le gritaban que se parara, pero optó por internarse entre la selva baja y se les perdió de vista, dándose cuenta que había salido hasta donde estaba una cerca de alambrado, la cual escaló y cayó, percatándose que estaba cerca del hotel Grand Coral, ubicado en el cruce del bulevar Playa del Carmen con Arco Vial Norte, donde en esos momentos varios oficiales de Tránsito atendían un accidente.
Al ver la presencia policiaca, corrió hacia ellos y se metió a una ambulancia de la Cruz Roja para esconderse, pero los paramédicos lo bajaron y empezó a gritar que lo querían matar, por lo cual un elemento de Tránsito Municipal lo aseguró y solicitó la presencia de más unidades de Seguridad Pública que llegaron sólo minutos después, pues andaban cerca investigando el reporte del levantón de este presunto sicario al servicio de alguna organización contraria.
Una vez que arribaron los refuerzos, lo subieron a una unidad policiaca y al ser interrogado manifestó llamarse Martín Iracheta Peralta, de 20 años de edad, originario de Monterrey, y que había sido levantado del interior del antro “La Rumba Caribe”, donde al parecer opera una célula de “Los Zetas”, por lo cual se les atribuye este levantón y fallido intento de ejecución.
Fuentes dignas de crédito manifestaron que al perecer el detenido es en realidad un sicario o tirador al servicio de una banda contraria, pues las características que presenta y de acuerdo con el reporte del caso a través del número de emergencias, lo señalan como tal, pero toca a las autoridades judiciales investigar a fondo para conocer a ciencia cierta la veracidad de la información.
Con respecto a los dos amigos con los cuales originalmente ingresó al antro en mención, se presume que sí fueron levantados, pues de forma misteriosa desaparecieron cuando se divertían, por lo cual no se descarta que en las próximas horas sus cadáveres aparezcan ejecutados en algún lote o en los montes aledaños a la mancha urbana, por lo pronto el detenido está en los separos de Seguridad Pública y en las próximas horas será puesto a disposición del Ministerio Público para rendir su declaración en torno a los hechos.
Cabe hacer mención que el antro “La Rumba Caribe” ha sido señalado en múltiples ocasiones como punto de reunión y operación de la organización criminal “Los Zetas”, así como los bares “La Valentina” y “El Abrevadero” que son operadas por una misma persona al parecer de apellido Hernández, originario del Distrito Federal. (Fuente: Diario de Quintana Roo)