CANCÚN, MX.- Luego de ser detenida por la Policía Judicial del Estado (PJE), por el homicidio de quien fuera agente del Ministerio Público, Jaime de la Cruz Radilla, la presunta responsable, Lucía López Morfín, confesó que mató a su pareja porque “ya estaba cansada de que no la apoyara económicamente” y que “sólo tenía ojos para su otra familia”, informó el encargado en turno de la Representación Social.
Al rendir su declaración ministerial, dentro de la averiguación previa número 998/2013, por el delito de homicidio calificado, la indiciada, concubina del hoy occiso, relató cómo se dieron los hechos y aceptó su autoría en el crimen perpetrado la madrugada de este viernes, en la supermanzana 216, manzana 6, lote 1, casa 5.
Lucia López Morfín, de 34 años de edad, originaria del Estado de Tabasco, concubina de 6 años, procreó un hijo con el licenciado Jaime de la Cruz, y declaró que tenían muchos pleitos por asunto de dinero, y anoche tenía mucho coraje porque le pidió dinero para atender un choque que tuvo, pero éste le contestó que le dio todo el dinero a su familia y eso la enfureció, además que la dejó hablando sola mientras él se dormía.
El cuerpo del hoy occiso recibió 48 lesiones de arma punzocortante y punzopenetrante que le causaron la muerte; la homicida le aplicó cloroformo para someterlo y evitar que se defendiera, al ver que ya estaba inconsciente le clavó el cuchillo en el pecho.
El reporte del homicidio llegó a la guardia de la policía Judicial a las 02:30 horas por lo que el personal de guardia, peritos, agentes investigadores y del Ministerio público se trasladaron al lugar de los hechos para iniciar las diligencias de fe del cadáver y levantamiento del cuerpo.
En la escena del crimen los peritos de los Servicios Periciales observaron en una habitación de la planta baja de la vivienda, el cuerpo del hoy occiso en posición de decúbito dorsal, sobre la cama, desnudo, con las manos hacia el frente, atadas con cinta canela y con lesiones de arma blanca.
En el lugar se encontraron un cuchillo cebollero de 40 centímetros sobre la cama, un pica hielo sobre el tocador envuelto con papel de baño, manchado de sangre y un rollo de papel de baño en el tocador con manchas de sangre, sobre el mismo tocador se encuentra una botella de alcohol de curación, y una botella de alcohol en una repisa, a la mitad de su contenido.
Se observó goteo dinámico en el cuarto, pasillo, escaleras y sala, y se observaron huellas de pisadas descalzas, de 24 centímetros, en la sala y comedor, y en la recamara las pisadas se observan barridas.
Se encontró un trapeador con manchas de sangre con el que al parecer limpiaron las gotas de sangre en la sala, en la planta alta se observan pisadas descalzas con sangre en una recama y el baño; en el baño se encontró un trapeador, una bata de mujer manchada de al parecer sangre y una toalla húmeda colgada.
En la zona de regadera se observó húmedo al parecer recién usado, se aplicó luminol para rastrear sangre en el baño, fuera de la regadera y salió positivo a luminiscencia, también se aplicó rastreo hemático en todo el lugar y dio positivo.
Refiere una vecina que llegó la esposa del hoy occiso con calcetas puestas a pedir auxilio, con una toalla amarrada cubriendo nariz y boca, con un nudo sencillo y con olor a alcohol; asimismo tenía encintadas las manos hacia atrás, pero la vecina con un ligero tirón se la quitó.
Se concluye que encontraron en el cuerpo 48 heridas por arma blanca, cuatro de estas fueron penetrantes en cavidad de tórax y nueve en cavidad abdominal. (Fuente: Diario de Quintana Roo)