Este cambio también se da junto con la renovación de funcionarios en la Semarnat, tanto a nivel central, como en la delegación en Quintana Roo.
La anterior delegada, Gabriela Lima Laurents, en su momento señaló que el proyecto no requería de la autorización de la Semarnat, pues contaba con el permiso de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) otorgado en septiembre de 2012 por el Instituto de Impacto y Riesgo Ambiental (Inira), que forma parte de la Secretaría Estatal del Medio Ambiente (SEMA).
De hecho, organizaciones ambientalistas como el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) y Voces Unidas de Puerto Morelos, señalaron que la SEMA no tenía facultades para otorgar los permisos ambientales y que eso correspondía a la Semarnat.
Sin embargo, el nuevo delegado de la Semarnat, Raúl Omar González Castilla, anunció que el Dragon Mart será evaluado por esa dependencia federal. (Información completa en Proceso)