Los individuos refirieron que pasaron al menos cinco días en mar abierto, con tan sólo galletas y agua, sin embargo, su estado físico parecía demostrar lo contrario.
Los cinco antillanos fueron encontrados por elementos de la Policía Municipal de Isla Mujeres y fueron puestos a disposición del Instituto Nacional de Migración (INM).
De acuerdo al director de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito de Isla Mujeres, Joaquín Poot Acosta, a la 01:45 de la tarde de este lunes el 066 recibió una llamada anónima en la que se reportaba el hallazgo de una pequeña embarcación hechiza, encallada en el área de Isla Blanca, a dos kilómetros del restaurante Acapulquito, de la cual descendieron varias personas, el denunciante señalaba que tal vez los sujetos se trataban de cubanos indocumentados, los cuales comenzaron a caminar sobre la playa.
De inmediato, se movilizaron las unidades de Seguridad Pública ubicadas en la zona continental al mando del director general de Seguridad Pública y Tránsito, quienes al llegar a la zona indicada llevaron a cabo un recorrido por el área, y lograron detectar a cinco personas, cuatro hombres y una mujer, mismos que caminaban a la orilla de la laguna.
Los mismos fueron interceptados y tras identificarse trasladados a las instalaciones de la comandancia en la Zona Continental, donde personal de la Cruz Roja los valoró con objeto de constatar su estado de salud, para ser puestos posteriormente a disposición del Instituto Nacional de Migración (INM).
Los policías encargados del operativo no podían dar crédito a que en tan precaria embarcación pudieran haber zarpado y navegado desde Cuba, misma que estaba confeccionada a base de láminas de zinc, así como una lona y un gran saco extendido como velas; en el interior se encontraron algunos alimentos para aguantar la travesía, algo de ropa y otras pertenencias.
Los cubanos, de edades comprendidas entre los 17 y los 39 años, responden a los nombres de Claudia Domínguez Mustelier, de 17 años, estudiante; Anselmo Javier Martínez Morales, de 36 años, de ocupación campesino; Félix de los Ángeles Berry, soldador de 33 años; Jovany Pelier Erez, de 37 años, quien se desempeña como carpintero y Ángel Asaharez Pavila, de 39 años, también soldador de profesión.
La historieta
En una entrevista para el POR ESTO! de Quintana Roo, los cinco antillanos aseveraron que todo era un juego del destino y poca suerte, pues su aventura terminó de la peor forma posible.
Los cubanos señalaron que fue la semana pasada, hace aproximadamente seis días, que “se encontraron” la precaria embarcación abandonada en la playa denominada Buena Vista, ubicada en el centro de Cuba, por lo que decidieron tomarla para salir de la ínsula.
Afirmaron que pasaron al menos cinco días navegando en mar abierto, sin rumbo y fuertes mareas, con tan sólo botellones de agua y paquetes de galletas, además de algunas bolsas con mudas de ropa.
Refirieron que su idea era llegar a Cancún para trabajar y conseguir dinero, el cual posteriormente utilizarían para cruzar a los Estados Unidos y encontrarse con sus familiares.
A pesar de estas declaraciones, los antillanos contaban con un buen semblante, pues además de que no presentaban huellas de insolación o desnutrición, portaban ropas limpias y los rostros perfectamente rasurados. (Fuente: Por Esto! de Quintana Roo)