CHETUMAL, MX.- Sin mencionar la elevada deuda pública de Quintana Roo que hoy tiene al estado y a la mayoría de los municipios sumidos en una severa crisis financiera y sin dedicarle por lo menos una frase al conflicto magisterial que desde hace más de una semana reventó en un paro indefinido de clases, provocando una creciente polarización social por la falta de respuestas y que fue la causante directa de que el Gobernador cancelara su asistencia a su propio informe en el Congreso, Roberto Borge transmitió hoy, por radio y televisión, un mensaje previamente grabado en el que soltó cifras alegres y mensajes de esperanza y en donde, en resumen, pintó un estado idílico donde no existen problemas ni amenazas y donde a todos nos va a ir muy bien.
Por supuesto, las acusaciones de que desvió millones de pesos de la cuotas del magisterio para el Fovissste y el SAR no merecieron comentario alguno por parte del Gobernador, a pesar de que este reclamo, aun por encima del rechazo a la reforma educativa, es la principal causa de que miles de maestros dejaran las aulas para protestar en la calles.
De hecho, los reclamos no atendidos de los maestros y la falta de voluntad para avanzar en el diálogo fueron los ingredientes que el viernes pasado provocaron que las quejas de los maestros degeneraran en un zafarrancho en el que enfrentaron con escoltas del Gobernador cuando el convoy de Roberto Borge abandonaba el estacionamiento del Palacio de Gobierno en Chetumal.
Borge tampoco habló del delpilfarro de recursos durantes los pasados comicios ni del enfrentamiento entre partidos y actores políticos provocó con su burdo intervencionismo en asuntos electorales o municipales, pero este lunes, en su mensaje, hizo un “reconocimiento” a los presidentes municipales salientes y dio la bienvenida a los entrantes, a quienes ofreció “trabajar de la mano para hacer ciudades y municipios más competitivos y abatir la marginación de las comunidades rurales”
Durante la lectura de su mensaje, en la que se le escuchaba y veía apresurado y por momentos impaciente, Roberto Borge dijo que, al igual que el presidente Enrique Peña Nieto, “está comprometido a trabajar para que los ciudadanos tengan más seguridad en sus colonias y que la gente pueda salir tranquila a trabajar”, pero también con un crecimiento “con más orden” y diversificación de la economía.
En este punto, expreso su confianza de mejoría económica de la capital del estado y de los municipios más pobres del estado: “quiero un mejor Chetumal, con crecimiento en la Costa Maya para que brinde a sus jóvenes oportunidades de crecimiento y trabajo; que Bacalar, José María Morelos, Carrillo Puerto y Lázaro Cárdenas dejen de ser municipios pequeños y se integren al desarrollo de las regiones del Estado en las cuales están participando”.
En este caso omitió mencionar que los recursos del Ayuntamiento capitalino fueron dilapidados y mal administrados por el Alcalde Carlos Mario Villanueva Tenorio sin responsabilidad alguna, y que los llamado municipios rurales, durante los dos últimos años, fueron castigados con retención de las participaciones federales que impidieron un fluido desarrollo.
En su mensaje de 30 minutos a los quintanarroenses, con motivo del II Informe de Gobierno, el cual fue transmitido por radio y televisión en cadena estatal, señaló que Tulum –donde mandó a encarcelar a la ex Alcaldesa Edith Mendoza Pino– tendrá que despuntar en su crecimiento económico apoyado en buenas tarifas hoteleras; Playa del Carmen continuará su crecimiento en Solidaridad -y hacia Puerto Aventuras y su colindancia con Tulum, con mejores servicios básicos y mejor disciplina financiera en su municipio, aunque nada dijo del endeudamiento de casi 700 millones de pesos que en menos de tres años dejaron como Alcaldes Filiberto Martínez y Rafael Kantún Avila.
Y sobre Cozumel, municipio colapsado por la pésima administración del priista Aurelio Joaquín, dijo que este municipio “también está en el rumbo de una reingeniería financiera para hacer frente a los retos que tiene su comunidad”, pero sin que exista responsabilidad civil o penal por las irregularidades cometidas.
Además, aseguró que Isla Mujeres y su parte continental tendrán crecimiento este año con nueva infraestructura hotelera y el proyecto de Ciudad Mujeres, que generará empleos.
En el caso de Benito Juárez, dijo que este municipio que durante los últimos dos trienios ha sido gobernado por el PRD y que ahora pasará a manos del PRI, “tiene el reto de crecer con más orden, disciplina presupuestaria, pero sobre todo llevando más beneficios a su subdelegación, delegaciones y a su alcaldía. “Vamos a hacer más pujante al municipio más importante de Quintana Roo”, dijo.
Por otra parte, el Gobernador formuló un llamado a las fuerzas políticas para trabajar unidas por Quintana Roo y agradeció a los ciudadanos “la confianza que le han brindado en estos dos años y medio de su gobierno”.
Asimismo, afirmó que “es un hombre y político que respeta las ideologías y partidos políticos y dejó en claro que con sus decisiones siempre ha buscado el beneficio de todos los quintanarroenses”.
Aunque el Gobernador tampoco se refirió a la disparada deuda pública de Quintana Roo, que apenas el pasado mes de julio se incrementó en otros 5 mil millones de pesos para rebasar los 18 mil millones de pesos, aseguró que en este segundo año de su Gobierno “se avanzó en obra pública y se ejerció de manera responsable el gasto social”.
No quiso Roberto Borge reconocer que el estado se encuentra en crisis financiera y que por eso se vio obligado a implementar una “reingeniería de la administración pública” que implicó la fusión de dependencias y la aplicación de un supuesto plan de austeridad que permitirá, según el mandatario, “importantes ahorros y evitar que se arriesguen el desarrollo humano y el futuro de las familias”.
“En los próximos dos años impulsaremos políticas públicas para crecer en por lo menos dos dígitos el presupuesto del Estado —afirmó—. Implementamos políticas de reingeniería gubernamental que nos permitirán tener ahorros sustanciales ante la crisis económica y ante la reducción en los ingresos y estamos conscientes de que tendremos que ajustar el gasto para invertir en desarrollo social. Ese es el compromiso número uno de mi gobierno: hacer más con menos”.
Explicó que la “reingeniería” responde a un compromiso social, de responsabilidad en el manejo de los recursos públicos y que el gasto corriente de un gobierno debe ser revisado periódicamente para que no postergue la verdadera inversión que apuntala el crecimiento y garantiza el futuro.
“Un gobierno no puede sostener un gasto corriente y de operación por encima de lo que se debe invertir en salud, escuelas dignas, agua potable, alumbrado público, carreteras, desarrollo económico, generación de empleos e inversión productiva para el campo”, reconoció un Roberto Borge que tampoco mencionó que en este último año gastó sin contemplaciones dinero del erario para viajes y excesos y que, incluso, usó tres millones de pesos para ampliar el palco VIP en el estadio de beisbol “Beto Ávila” de Cancún, para asistir con toda comodidad a los partidos de los Tigres de Quintana Roo.
“En Quintana Roo florece la semilla de la esperanza, con la seguridad de un futuro mejor para nuestros hijos, quienes estarán seguros y crecerán sanos y fuertes, porque en Quintana Roo estamos viviendo momentos de transformación y los buenos tiempos del desarrollo”, dijo. (Noticaribe)